La economía nacional, como en el cine mexicano que se está destacando con películas como “No se aceptan devoluciones”, que batió récord en taquilla frente a otras producciones de Hollywood, está logrando diferenciarse porque está creciendo a pesar de las restricciones que enfrenta, y tiene perspectivas para estar optimistas de que una vez que se revierta el entorno adverso, nos irá mejor, aseguró el secretario de Hacienda y Crédito Público, José Antonio Meade.
“Desde el punto de vista ya de otra industria, la película de ´No se Aceptan Devoluciones´, en la que se gastó 5.5 millones de dólares, la vieron 15 millones de personas en México, que son las mismas que vieron ´Iron Man´, en la que se gastaron 200 millones de dólares, y un número superior también a ´Rápido y Furioso´, en la que se gastaron 160. Algo hay de interesante en esa película que vale la pena, para entender su éxito en taquilla”, ponderó durante la Corporate Leaders Summit 2017 organizada por Citibanamex en Punta Mita, Nayarit.
Meade ahora recurrió a la analogía del cine mexicano con la película protagonizada, coescrita y dirigida por el actor y comediante Eugenio Derbez, para destacar las principales fortalezas de la economía mexicana, aunque no dejó de mencionar las que utilizó en presentaciones anteriores en las que utilizó ejemplos de equipos de beisbol, futbol y basquetbol.
“¿Por qué viene todo esto a cuento con cargo a la economía mexicana? La economía mexicana, igual que los Guerreros, igual que ‘No se Aceptan Devoluciones’; igual, además, que en el caso de los Oaklands, tenemos restricciones bien importantes”.
Destacó que de 2014 a 2016, la plataforma petrolera de producción al igual que los precios de la mezcla mexicana de crudo en un momento en que las finanzas públicas están en un programa de consolidación fiscal que implica retirar el estímulo por la vía del gasto a la economía.
Aseguró que en términos generales, lo que vemos es que “una economía más compleja, más flexible, más moderna, aún en un entorno difícil nos empieza a dar buenos réditos”.
Estableció que “si ese entorno se nos corrige, y se nos corrige para bien, el potencial y las perspectivas debían sin duda mejorar”.
