La huelga de hambre que efectúa el ex gobernador de Veracruz, Javier Duarte de Ochoa desde el jueves pasado, formaría parte de su estrategia para pedir que revisen su procedimiento, de acuerdo a especialistas.
Luego de que se dio a conocer que el ex priista (acusado por delincuencia organizada y operaciones con recursos de procedencia ilícita) escribió una carta en la que señaló que hay una persecución política en su contra y que realizaría una huelga de hambre en protesta.
Indicaron que la huelga de hambre es muy común en los reclusorios y que, cuando uno o varios internos deciden recurrir a ello, lo normal es que se les concentre en el auditorio, donde se les proporcionan litros de agua, miel y limones, además de que un médico que los vigila constantemente. “Con el señor Duarte es igual pero con la diferencia de que va a permanecer en su celda”, afirmaron.
Destacaron que el escrito que hizo el ex priista pasó a manos de la Subsecretaría del Sistema Penitenciario de la Ciudad de México, la cual le turnó copia a la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH).
“Esto es una proclama política porque él, a comparación de los demás, no se queja de las condiciones de la cárcel, se inconforma por ser perseguido político. Después que expresó su inconformidad se le trasladó al hospital del Reclusorio para que lo pesen, lo revisen y eso se llama certificación medica”, indicaron.
Cabe destacar que el custodio del veracruzano en el reclusorio anota en una bitácora las actividades que realiza diariamente, además de que acude tres veces al día un médico para revisar sus signos vitales y pesarlo.
En tanto Rodolfo Reyes, perito y ex trabajador de la PGJ-CDMX, afirmó que no es nuevo el actuar del veracruzano, “hay que recordar al ex gobernador de Sonora, Guillermo Pádres, que se sometió a huelga de hambre para que a su hijo –ahora en libertad- lo trasladaran al Ceferepsi de Morelos; también el ex gobernador de Quintana Roo Mario Villanueva, entre otros”.
Por su parte Cynthia Estrada, Health Coach en Nutrición Integral, comentó que el ex priista está efectuando un ayuno prolongado, en el que, entre el tercer y quinto día, el cuerpo comienza a usar su grasa almacenada para producir energía.