Los espías humanos pronto serán reliquias del pasado y la CIA lo sabe muy bien. Dawn Meyerriecks, subdirectora de desarrollo tecnológico de la Agencia, dijo recientemente a una audiencia en una conferencia de inteligencia en Florida que la CIA se estaba adaptando a un nuevo panorama en el que su principal adversario es una máquina, no un agente extranjero.
De acuerdo con “The Next Web”, Meyerriecks dijo que otros países han confiado en Inteligencia Artificial (AI) para rastrear agentes enemigos durante años. Continuó explicando las dificultades encontradas por espías actuales de la CIA que intentan vivir bajo una identidad asumida en la era del rastreo digital y las redes sociales, indicando que el mundo moderno se está convirtiendo en un ambiente inhóspito para los espías humanos.
No obstante, la agencia de espionaje más antigua de Estados Unidos se está transformando del tipo de atuendo que envía personas de todo el mundo para recopilar información, al tipo que usa computadoras para realizar la misma tarea de manera más eficiente.
Esta transición de los humanos a las computadoras es algo por lo que la CIA ha pasado más de 30 años preparándose.
Los espías de hoy tienen el mismo problema que ayer: la necesidad de ser invisible. Lo que ha cambiado es el adversario. En lugar de engañar a la gente con documentos falsos y mentiras bien contadas, los agentes deben engañar a las computadoras capaces de distinguir una sola cara entre la multitud.
Según Meyerriecks, al menos 30 países tienen la capacidad de hacer esto con los actuales sistemas de cámaras CCTV. Y eso significa que las herramientas de contrainteligencia tienen la ventaja en el juego internacional de las escondidas que es la comunidad de inteligencia global.