Luego de afirmar que “el asesinato de una mujer es la negación de nosotros mismos”, César Camacho, candidato del PRI al Senado de la República por el Estado de México, se comprometió a “garantizar en la ley que nuestras niñas, jóvenes y mujeres no sigan siendo víctimas de violencia de género, así como el acceso a la justicia a todas aquellas mujeres que han muerto, formulando bases concretas para que el feminicidio se castigue frontalmente”.
“Propondré un nuevo tipo penal en la Ley General para garantizar a las Mujeres el acceso a una Vida Libre de Violencia, que además de derogar la ambigua redacción del Código Penal Federal, homologará el criterio en todo el país, será más claro y ampliará el concepto para que las autoridades consideren el contexto de violencia a toda forma de agresión contra la mujer, incluyendo el feminicidio”, subrayó.
Al participar en el primer conversatorio denominado “Nuevas Leyes para Vivir Seguros”, de un total de ocho que se llevarán a cabo en todo el territorio estatal, el abanderado tricolor aseguró que “más que un defensor, seré un aliado, un compañero de trayecto y de destino de las mujeres mexicanas”.
Tras de reconocer que, si bien ha habido avances al respecto, “el primero es que existe la tipificación del delito y una fiscalía que ha trabajado con éxito”, Camacho calificó también este delito como “un fenómeno complejo en un estado donde habitan 17 millones de personas que demanda un perfeccionamiento del entramado legal y también la capacidad operativa de las instituciones”.
En el auditorio de la Universidad de Ecatepec y ante centenares de alumnos, docentes y sociedad civil, Camacho dijo que es urgente repensar el modelo policial y que para ello es necesario “iniciar por las coincidencias antes que por las diferencias”, por lo que -dijo- buscará también impulsar un Código Penal único, a fin de buscar solución “al polémico, pero indispensable tema de la inseguridad, en el cual el Estado Mexicano está en falta”.
En este sentido, propuso también trabajar más en temas como la cultura de la legalidad, “porque a México le hace falta” y en la dignificación de la labor policial, “más que en los incrementos salariales” que se deben otorgar a estos servidores públicos.
Por ello, se comprometió a crear desde la Cámara Alta “un espacio de neutralidad partidaria para construir consensos que nos permitan preservar valores como la libertad, la justicia y la paz, “en ese sentido será mi abono”, aseveró.
Por su parte, Jimena David, investigadora del Programa de Seguridad “México Evalúa”, se pronunció por una mayor coordinación de los tres niveles de gobierno en materia de seguridad, “porque no la hay”, con el propósito estar en mejores condiciones de impulsar una verdadera reforma policial que esté sustentada en la prevención, la reducción y la contención.
Finalmente, Bernardo León Olea, Comisionado Municipal de Seguridad en Morelia, Michoacan, pidió una reforma integral al sistema político “para que pueda reformarse el sistema de seguridad y justicia”, que contemple la desaparición de la figura del Ministerio Público, por considerarlo “un cuello de botella, una puerta giratoria que no funciona, porque no se investiga el delito si no hay una denuncia”.