La violencia se ha apoderado del Estado de México. La ingobernabilidad ha encontrado en la entidad mexiquense una zona de confort debido a la ingobernabilidad por parte del gobernador Alfredo del Mezo, primo del presidente Enrique Peña Nieto.
Con base en cifras oficiales del primer semestre de 2017, en comparación con el 2018, se puede ver que la seguridad que prometió el entonces candidato a sus posibles votantes, ha sido incumplido: el robo de vehículo se incrementó en 34%; el de motocicletas 59.7%.
Mientras que el robo en transporte público se incrementó en 13%; el robo a casa habitación 11.1%; el homicidio doloso en 5.4%.
Los delitos de lato impacto, por ejemplo los feminicidios también han ido en aumento y es en 5.8%; mientras que el abuso sexual 11.6%; el acoso sexual 1.6%; la violencia familiar 7%; la extorsión 8.7%; la evasión de presos 66%, así como los delitos contra el medio ambiente un 56.2%.
El Edomex, de acuerdo al más reciente reporte oficial del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), registró 132 mil 366 delitos de enero a junio de este año
Las cifras colocan a la entidad en primer lugar a nivel nacional en cuanto a cantidad de delitos que dejaron huella institucional; es decir, denuncia y en posición décimo quinta a nivel nacional en relación al índice delictivo por cada cien mil habitantes.
El Estado de México se posiciona en primer lugar a nivel nacional en robo de vehículos asegurados en comparación con otras entidades federativas, pues tan sólo en el último año se registraron 26 mil 600 robos, es decir, alrededor de 70 autos diariamente, informó el presidente de la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros, Carlos Jiménez Palacios.
El ilícito que registró un crecimiento extraordinario en el periodo que se compara, primer semestre de 2017 con 2018, es el robo de vehículo con y sin violencia, al pasar de 17 mil 769 a 23 mil 921 unidades desaparecidas.
A casi un año de asumir el cargo, diseñar e implementar diversas acciones en esa área, el comparativo (primer semestre de 2017 y 2018) de la incidencia delictiva, muestra que los resultados no han sido positivos en muchos delitos.
