María Herrera vive en duelo permanente desde que cuatro de sus ocho hijos desaparecieron.
“Es algo muy terrible porque te olvidas de todo. Para mí esta es la prioridad: buscar y encontrar a mis hijos”, dice la mujer que lleva 10 años de búsqueda.
Algunas de las afectaciones que tienen los familiares de las víctimas son depresión, trastornos del sueño y de la alimentación, gastritis, colitis e, incluso, cáncer.
Con información de cadenanoticias.