Iniciativa busca reformar la ley para castrar quimicamente a pederastas en la capital
La reforma propone que se analicen los casos para aplicar la castración química de ser necesario
En el Congreso de Ciudad de México se propuso el día de hoy una iniciativa que contempla castración química para pederastas.
El proyecto fue presentado por el diputado local Nazario Norberto Sánchez, quien dijo que este tipo de delitos requieren penas más severas pues se atenta contra los niños.
La iniciativa propone reformas al Código Penal de la capital mexicana, entras las que se incluye:
– Tipificar la pederastia como un delito grave
– Incrementar sanciones a quienes cometan este delito
– Castigar a reincidentes con tratamiento de medicamentos para inhibir el deseo sexual
Sánchez definió al ilícito cuando una persona se aprovecha de la confianza, subordinación o superioridad sobre un menor de 18 años para obligarla, inducirla o convencerla de ejecutar cualquier acto sexual con o sin su consentimiento.
“Se aplicará de 12 a 20 años de prisión a quien se aproveche de la confianza, subordinación o superioridad que tiene sobre un menor de 18 años, derivada de su parentesco en cualquier grado, tutela, curatela, guarda o custodia”, precisó.
Esto constituye modificaciones en el Código Penal de la Ciudad de México, en el Título Quinto de Delitos Contra La Libertad y La Seguridad Sexuales y El Normal Desarrollo Psicosexual, Capítulo VII, denominado Pederastia.
El morenista argumentó que las reformas son necesarias debido a que la legislación vigente no resuelve el problema actual de la pedofilia, ni protege a los niñas, niños y adolescentes de la violencia sexual.
Otra de las reformas especifica que cuando el acto fue cometido en contra de menores de cero a cinco años de edad e incapaces las penas vayan de los ocho a diez años más de prisión; y de seis a ocho años de cárcel si la víctima es mayor a seis años y menor 11 años.
En el caso de los reincidentes, la iniciativa de Morena propone que sea un juez quien analice el caso y considere si los delincuentes deben ser sometidos a tratamiento psiquiátrico y medidas como el suministro de medicamentos para inhibir el deseo sexual como medida preventiva, es decir castración química.
Además se plantea de que en el caso de que sea el propio delincuente quien solicite el tratamiento químico, esto le dará la posibilidad de disminuir su pena.
