Durante 2017, la tasa de feminicidio cometido en Puebla superó a la de cuatro entidades en donde está activa la Alerta de Violencia de Género (AVG): el Estado de México, Michoacán, Quintana Roo y Nayarit, de acuerdo con los datos registrados por el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP) de la Secretaría de Gobernación (Segob).
Esto es: la tasa de este delito por cada 100 mil habitantes aumentó de 0.09 a 0.42 de 2016 a 2017 y el año pasado estuvo por arriba de las entidades ya mencionadas; es decir, la proporción de feminicidio en Puebla fue mayor que la de estados en donde la Federación ha activado un mecanismo de emergencia para prevenir y sancionar la violencia contra las mujeres.
En 2015 el registro oficial es de 6 casos de feminicidio cometidos en Puebla, en 2016 la cifra se duplicó y para 2017 llegó a 27. Es decir, el aumento en el número de casos en este periodo fue de 450 por ciento.
Sin embargo estas cifras están muy por debajo de las que reconocen las organizaciones e incluso de los registros del Inegi.
El Observatorio de Violencia Social y de Género del Instituto de Derechos Humanos Ignacio Ellacuría de la Ibero Puebla (DHIE) reconoce en 2015, 81 casos de feminicidio, en 2016 un total de 84, en 2017 otros 106 y hasta el 24 se octubre de este año otros 66 casos.
Esto se debe a que los datos del SESNSP son proveídos por la Fiscalía General de Justicia (FGJ) con base en lo que el MP calificó o consideraron como feminicidio, mientras que las organizaciones hacen un registro hemerográfico de los casos.
LOS BORROSOS REGISTROS DEL FEMINICIDIO
Organizaciones como Data Cívica considera que los datos de Inegi son más confiables pues a pesar de basarse en muertes violentas (actas de defunción) y no específicamente en casos de feminicidio determinados por la Fiscalía, revelan más certera y realmente la situación de violencia que viven las mujeres y, sobre todo, que las mata.
Así, de acuerdo con Inegi hubo 143 asesinatos violentos de mujeres en la entidad durante el año pasado, de las cuales 31 murieron a causa de disparo por arma de fuego en espacios públicos, 18 por agresiones de objetos cortantes en la vivienda, 12 perdieron la vida siendo ahorcadas en viviendas, 10 por disparos en lugares no especificados, 9 estranguladas en espacios públicos, y el resto por otros motivos también violentos.
Algunas características del feminicidio son el lugar donde se comete el crimen, que suele ser en el domicilio de la víctima; la identidad del feminicida, que en la mayoría de los casos es una persona cercana, como pareja o ex pareja, y el tipo de arma, que con frecuencia es arma blanca.
Por ejemplo, Inegi reporta que del total de homicidios violentos de mujeres en la entidad, 47 de las víctimas, 33 por ciento, fueron asesinadas dentro de viviendas, en espacios privados.
LA ALERTA DE GÉNERO EN PUEBLA
En octubre de 2017, la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) solicitó la activación de la Alerta de Género en Puebla. Desde 2013 la violencia contra las mujeres en el estado ha aumentado y hasta septiembre del año pasado habían sido cometidos 83 casos de feminicidio, de acuerdo con el organismo; no obstante, las carpetas de investigación iniciadas por ese delito siempre han sido menos.
Es por eso que las cifras oficiales de feminicidio cometido en Puebla registradas en el SESNSP no concuerdan con las de colectivos y organizaciones civiles, que registran el número de delitos con base en las notas hemerográficas publicadas sobre posibles casos de feminicidio en el estado.
A pesar de que en 2017, cuando fue solicitada la Alerta de Género para Puebla, la tasa de feminicidio por 100 mil habitantes fue mayor que en cuatro estados en donde ya está en marcha la medida de emergencia, la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia Contra las Mujeres (Conavim) de la Segob solo emitió 15 recomendaciones para el estado.
Actualmente hay al menos 2 solicitudes de AVGM para Puebla.
