Un audio donde la presunta dueña de una farmacia le exige al médico vender más medicinas se viralizó en redes sociales de Hermosillo.

En este se escucha cómo una mujer le dice a un doctor: “estaba viendo las recetas, hay que ponerse las pilas doc, tú te llevas 600 pesos y me das a ganar 100 pesos a mí, entonces si necesitamos platicar porque no es posible que estés dando loratadina, clorofenamina y paracetamol, yo pienso que hasta uno lo puede dar, ¿no?”, asevera la persona en la grabación.

El diario Proyecto Puente ubicó la farmacia y consultorio a los que se hace referencia en el audio, que se encuentran en el Bulevar Paseo de Las Quintas, casi esquina con Quinta Mayor de la colonia Las Quintas de Hermosillo.

Una empleada de mostrador, que se identificó como María Elena, dijo conocer la existencia de dicho audio, y confirmó que se trataba de su jefa, pero que no se encontraba y que ella no podía dar más información.

En un recorrido por el lugar, se preguntó a las personas si conocían el audio, y la mayoría dijo no saber de que se trataba, pero al escucharlo identificaron a la persona como Teresa, dueña de la farmacia Genéricos Intercambiables, que por más de 15 años ha operado como farmacia y consultorio. Pero prefirieron no dar alguna opinión al respecto.

Se solicito durante dos días la versión de la encargada del establecimiento, quien según la última información dada a este medio, no se encontraba en condiciones de atender la entrevista al estar seriamente afectada por la situación.

Es una práctica común recetar medicinas que no se necesitan.

El doctor Ronaldo Leyva, médico general que labora en consultorios anexos a farmacias, reveló conocer a algunos doctores a los que se les está exigiendo que vendan más medicinas, y que por amenazas de que si no lo hacen los van a correr, recetan lo que el paciente no necesita.

“Y lo que está pasando, es que cada ves estamos viendo más resistencias a antibióticos, por ejemplo, en esta temporada de invierno, a mí me tocó ver muchas infecciones respiratorias agudas, que son resistentes a antibióticos como la amoxicilina con ácido clavulánico, que últimamente se da mucho, y antes era muy buen medicamento, y precisamente esta temporada, mucha gente regresó porque tenía resistencia a este medicamento”, advirtió el doctor.

Dijo que debido a esto, los médicos tienen que pasar a otro antibiótico más fuerte, representando un riesgo para la salud.

Parte de la causa de estas prácticas, consideró, es que faltan ofertas laborables, y las que hay no están bien remuneradas, y si el médico no tiene otra fuente de trabajo, cae en esas presiones de los dueños de las farmacias.

Aunque como médicos están autorizados para recetar antibióticos, y es a criterio si lo ocupa o no el paciente.

“El 80 o 90 por ciento de las infecciones respiratorias no ocupan antibióticos, se está vendiendo demasiado antibiótico, demasiado medicamento, hemos visto recetas que tienen dos, tres antibióticos, un esteroide, un anti inflamatorio, son cinco, seis medicamentos, y es demasiado”, señaló Rolando Leyva.

Alertó a la ciudadanía que en algunos casos, lo que se está ahorrando en consulta lo está pagando en recetas de 300 a 600 pesos.

En un recorrido realizado por Proyecto Puente en consultorios de farmacias, se obtuvo información sobre los ingresos de un médico general que consulta en esta modalidad, estos oscilan entre los 700 a mil pesos diarios para quienes se colocan en el casco urbano, mientras que quienes atienden en las periferias ganan entre 300 y 500 pesos al día; hay casos en los que a los doctores se les paga una cuota fija de 600 pesos diarios, como se escucha en el audio que circula en WhatsApp.

Los gastos de renta, luz e insumos como algodón, jeringas, alcohol, gasas y de más, corren por cuenta del propietario de la farmacia.

El tiempo mínimo de estudios para ser un médico general, es de seis años y medio.

“Es un poco frustrante, invertirle tanto tiempo, y estar cobrando 40 pesos la consulta, pero si uno abre su consultorio no puede competir con consultas de 40 pesos”, lamentó el médico.

Con información de Proyecto Puente