Doce años antes de que fuera designado como candidato del Partido Revolucionario Institucional (PRI) a la Presidencia de la República y asesinado tras un mitin en Tijuana, Baja California, Luis Donaldo Colosio Murrieta fue espiado por elementos de la Dirección Federal de Seguridad (DFS) en 1982, cuando este organismo de inteligencia era dirigido por Miguel Nazar Haro, durante el gobierno de José López Portillo.
En el expediente que se encuentra en la caja 111 del Archivo General de la Nación (AGN) y del cual EL UNIVERSAL en exclusiva tuvo acceso, también se informa -en seis fojas que integran el archivo- que elementos de la DFS siguieron con detalle sus inicios como priista, así como el proceso de su candidatura para una curul en las elecciones federales de 1985.
En la media docena de documentos desclasificados también se reportan los nombres de políticos que más adelante ocuparían cargos como secretarios de Estado en las administraciones de los gobiernos de Miguel de la Madrid Hurtado y de Carlos Salinas de Gortari.
A diferencia de otras versiones públicas desclasificadas, el Comité de Transparencia del AGN no testó (borró) ningún dato o información del expediente de inteligencia de Luis Donaldo Colosio Murrieta.
En apoyo a Miguel de la Madrid. En el primer reporte, fechado el 8 de abril de 1982, en el entonces Distrito Federal, elementos de la agencia del Estado mexicano, antecesora del Centro de Investigación y Seguridad Nacional (Cisen), indicaron que en un evento del entonces candidato del tricolor Miguel de la Madrid Hurtado, Colosio presidió junto con media docena de destacados priistas, entre ellos Emilio Lozoya Thalmann -padre de Emilio Lozoya Austin, exdirector de Pemex y hoy prófugo de la justicia por supuestos actos de corrupción-, su apoyo al candidato presidencial.
Meses más tarde, Lozoya Thalmann sería designado subsecretario de Previsión Social en la Secretaría del Trabajo y Previsión Social en el gobierno de De la Madrid Hurtado, mientras que en el sexenio de Carlos Salinas de Gortari ocupó el puesto de director general del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE).
El reporte desclasificado detalla con exactitud cada movimiento que hizo el candidato presidencial Miguel de la Madrid esa mañana en la capital de la República.
“A las 9:40 horas, el candidato del PRI salió de su domicilio particular para trasladarse al parque Asturias, al que llegó a las 8:55 horas, siendo recibido por un contingente de mil 500 personas pertenecientes a Promotores Voluntarios, mismos que le ofrecieron un desayuno, durante el cual se exhortó para que voten en favor del partido.
“Del sitio anterior, se dirigió a las 9:45 horas al Centro Nacional de Productividad, al que arribó a las 10:50 horas, dándole la bienvenida 500 personas aproximadamente, donde se efectuó un acto presidido por Pedro Aspe Armella, Víctor Manuel Herrera, Gustavo Petriccioli, Emilio Lozoya Thalmann y Luis Donaldo Colosio, los cuales expusieron el tema El financiamiento de la estrategia de desarrollo, además de brindarle apoyo a su candidatura”.
Tras esos eventos, el candidato priista fue a encuentros en mercados y plazas de la Villa Olímpica, Villa Coapa, en el sur de la capital.
“Posteriormente, presidió un acto campesino en San Lorenzo Huipulco, un mitin en el Mercado de Villa Coapa, y se le fue ofrecida una comida en el restaurante Arroyo. En el centro social general Rodolfo Sánchez Taboada asistió a otro evento y, para finalizar, [arribó a] un mitin en la Plaza [de la] Constitución de Tlalpan, en el que se le brindó apoyo para que llegue a ocupar la Presidencia de la República”.
El reporte concluye señalando que “a las 19:00 horas, Miguel de la Madrid Hurtado se dirigió a su domicilio particular, con lo que dio por finalizado sus actividades de este día”.
Lucha por la diputación federal. Tres años más tarde, en un reporte fechado el 28 de febrero de 1985 en Hermosillo, Sonora, se dan los pormenores de los nombres de los siete precandidatos del Partido Revolucionario Institucional a diputados federales. Entre los que se encontraban en la lista aparecía el joven Luis Donaldo Colosio Murrieta.
El informe, firmado ya por el nuevo director de la DFS, José Antonio Zorrilla Pérez, quien más adelante sería señalado como el autor intelectual del asesinato del periodista Manuel Buendía, señala que ese día por la tarde en el salón presidente del PRI en la capital sonorense, se había realizado una conferencia de prensa en la que se difundió la lista de los siete precandidatos de ese estado para diputados federales.
“El día de hoy, de las 15:00 a las 16:30 horas tiempo local, en el salón presidente del edificio del PRI, ubicado en las calles Kennedy y Estadio de la ciudad, con una asistencia de 40 personas, se llevó a cabo una conferencia de prensa por el licenciado y diputado federal Maximiliano Silerio Esparza, delegado de Sonora del CEN [Comité Ejecutivo Nacional] del PRI, en la que dio a conocer los nombres de los siete precandidatos a ocupar las diputaciones federales de esta entidad.
“Dijo que después de haber consultado a los tres sectores que conforman su partido y con base a la convocatoria publicada en diarios locales, se postularon a los precandidatos por el PRI”, indica el documento.
En la mencionada lista destaca el nombre de Colosio Murrieta como precandidato del Primer Distrito con cabecera en Magdalena de Quino. Además, en una lista complementaria se detalla cada uno de los precandidatos y sus suplentes de nueve partidos registrados para la contienda. En la lista también aparece como precandidata para el Segundo Distrito del norte de Hermosillo a Alicia Arellano Tapia, madre de la ahora gobernadora de Sonora, Claudia Pavlovich Arellano.
Colosio gana diputación. En el tercer y último reporte desclasificado, con fecha del 14 de julio de 1985, la DFS reportó que tras la jornada electoral, de los 72 mil 146 sufragios válidos contabilizados, Colosio había ganado la elección para diputado federal por el Distrito I de Sonora, con más de 53 mil votos, frente a los 13 mil que había conseguido su más cercano contrincante del PAN.
El expediente desclasificado de Colosio Murrieta reproduce el acta de sesiones de las comisiones distritales electorales de Sonora, en la que se señala que el candidato priista obtuvo más de 80% de los votos emitidos en ese distrito.
Carrera en ascenso. Tras haber ganado un lugar como diputado federal, Luis Donaldo Colosio más adelante sería designado como Oficial Mayor del Comité Ejecutivo Nacional del PRI.
En 1988 vuelve a contender por un puesto legislativo, pero ahora para el Senado, donde gana el escaño, pero meses después se integra al equipo del entonces candidato presidencial Carlos Salinas de Gortari, quien resultaría vencedor en la contienda electoral en una de las elecciones más reñidas y controversiales en la historia del país.
De 1988 a 1992, Colosio Murrieta fue elegido como presidente nacional del PRI, cargo que deja debido a que Carlos Salinas de Gortari lo llamó para integrarse a su gabinete como titular de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol).
Al año siguiente, el 28 de noviembre de 1993, es postulado como aspirante a la Presidencia por el PRI y el 8 de diciembre toma protesta como candidato oficial.
Colosio Murrieta competía en esas elecciones con Cuauhtémoc Cárdenas por el Partido de la Revolución Democrática (PRD); Diego Fernández de Cevallos, del Partido Acción Nacional (PAN); Cecilia Soto, del Partido del Trabajo (PT); Jorge González Torres, del Partido Verde Ecologista de México (PVEM), y Marcela Lombardo, del Partido Popular Socialista (PPS).
También participaron Rafael Aguilar Talamantes, del Partido del Frente Cardenista de Reconstrucción Nacional; Álvaro Pérez Treviño, del Partido Auténtico de la Revolución Mexicana (PARM), y Pablo Emilio Madero, del Partido Demócrata Mexicano.
El asesinato. Sin embargo, el 23 de marzo de ese año, a las 16:05 horas, tras terminar un mitin en la colonia Lomas Taurinas, en Tijuana, Baja California, Luis Donaldo Colosio Murrieta fue asesinado al recibir dos balazos, uno en la cabeza y otro en el abdomen. Tres horas después se confirmó su fallecimiento.
Se acusó a Mario Aburto Martínez de ser el autor intelectual y material del asesinato, por lo que fue sentenciado a pasar 50 años en la cárcel. Actualmente se encuentra recluido en el Centro Federal de Readaptación Social (Cefereso) Número 1, ubicado en Almoloya de Juárez, Estado de México.
Además de Aburto, Domiro García Reyes, Tranquilino Sánchez Venegas, Vicente Mayoral Valenzuela, Rodolfo Mayoral Esquer, Othón Cortés Vázquez, y José Rodolfo Rivapalacio Tinajero fueron otros detenidos por el crimen del priista, suceso que se conoció como “la teoría de la acción concertada”, en la que se formulaba que diversos sujetos se habían coludido para que Aburto pudiera disparar. Todos fueron liberados, salvo Aburto.
Othón Cortés Vázquez fue acusado de ser el segundo tirador y pasó dos años en Almoloya. El detenido acusó haber sido torturado a tal punto que quedó sordo. Fue liberado y años después exigió la reparación del daño renal que sufrió por los golpes.
Expediente cerrado. El 20 de octubre de 2000, la extinta Procuraduría General de la República (PGR), todavía en el sexenio de Ernesto Zedillo Ponce de León -quien había sido designado como candidato presidencial del PRI tras el asesinato de Colosio Murrieta- decretó la reserva del expediente, en el que se concluía que Mario Aburto Martínez fue el autor material del crimen y que lo hizo sin un móvil político.
Miguel Montes, Olga Islas y Pablo Chapa fueron los tres fiscales especiales del caso Colosio, y aunque durante la administración de Vicente Fox Quesada se revisó el caso, se determinó que no hubo elementos para reabrirlo.
Seis meses de revelaciones. Desde marzo pasado, EL UNIVERSAL ha revelado decenas de expedientes de inteligencia que se encontraban en el Archivo General de la Nación, entre los que destacan los expedientes que elaboró el Estado mexicano del presidente Andrés Manuel López Obrador, de los exmandatarios Carlos Salinas de Gortari, Vicente Fox y Ernesto Zedillo Ponce de León, además de los actuales secretarios federales Olga Sánchez Cordero, Alfonso Durazo, Jorge Alcocer Varela y Javier Jiménez Espríu.
El Gran Diario de México también ha dado a conocer los expedientes de políticos como Cuauhtémoc Cárdenas, Porfirio Muñoz Ledo, Tatiana Clouthier y Elba Esther Gordillo; de personajes del espectáculo, como Juan Gabriel y Silvia Pinal, así como los relacionados con los escritores Gabriel García Márquez, Elena Poniatowska y Juan Rulfo.