La situación financiera de al menos 30 universidades del país se encuentra en números rojos y se prepara el escenario para una huelga general, sin embargo, el presidente López Obrador aseguró que no se trata de un adeudo de la federación y muy duro advirtió que «no caerá en chantajes».

Desde sindicatos hasta la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior (ANUIES), han sostenido reuniones con legisladores que revisan el presupuesto para el próximo año para pedir un incremento por hasta 17,000 millones de pesos, ante las presiones que cada vez se agrandan más.

Aunque la falta de recursos ya alcanza a más de una para este año. Por ejemplo, la Universidad Autónoma de Baja California (UABC) exige al gobierno la entrega de apoyos para poder cumplir con una deuda que ya asciende a 1,597 millones de pesos y por lo mismo, amenaza con una huelga. Pero como ella, otros grupos de trabajadores de universidades en el país alistan una huelga ante la falta de su pago.

El mandatario afirmó este miércoles que no se trata de una deuda de la federación, aunque aseguró que se revisaría con el secretario de Hacienda, Arturo Herrera, el presupuesto. De resultar que efectivamente el gobierno no ha destinado todos los recursos para este año, López Obrardor comprometió en liberar los recursos cuánto antes.

Pero muy duro advirtió: «Si no se tiene la razón, aunque se pare el país, porque si no vamos a estar a expensas de chantajes y nunca van a cambiar las cosas. Si hay justicia, sí. Sin dudas. No es de que ?nos agrupamos y va la huelga si no nos das’. Esos son grupos de presión y así no es la cosa. Ya se cambió dijo».

Aseguró además que el mensaje no era exclusivo de universidades: «Aplica para todo el país. No se trata de que no tenemos dinero, nos faltan recursos. Así ya no es la cosa. Cuentas claras. Primer es revisar cuánto se recibió y cómo se ejerció.

«Si son autónomas las universidades, pero tienen que haber también transparencia en el manejo de los fondos. Es dinero del presupuesto, del pueblo, sagrado. La autonomía no puede utilizarse para hacer una mala administración de los dineros del presupuesto», agregó.

Cuestionado sobre si aceptaría pagar los 17,000 millones que se exigen, López Obrador también fue contundente recordando el compromiso que hizo con los rectores para el presupuesto de este año: «No se puede más que lo que significa la inflación, el incremento inflacionario. Y tenemos que actuar así porque tiene que haber orden administrativo. Tenemos que actuar con disciplina. Porque si se da dinero a diestra y siniestra, pues entonces se caería en déficit». Además, dijo entonces que todos debían actuar con austeridad.