Veracruz.- Familiares y amigos recibieron con duelo el cuerpo del militar abatido durante los enfrentamientos armados que tuvieron lugar el jueves 17 de octubre en la ciudad de Culiacán, Sinaloa.
El elemento de las fuerzas armadas respondía al nombre de Alfredo, apenas tenía los 27 años de edad. Sus vecinos lo recuerdan como un joven noble que siempre se mostró atento con sus abuelitos y evitaba los conflictos.
La familia de Freddy, como le decían de cariño, se enteró de su muerte el mismo día de los hechos, a través de una llamada telefónica.
Su pérdida implicó un fuerte golpe emocional, ahondado a que dejo en orfandad a dos menores.
Angélica Medina, una de sus vecinas, declaró para medios locales que “Él atendía mucho a sus abuelitos, y su abuelita, los adoraba, los venía a visitar, se quedaba, a su madrina a su padrino, los saludaba, era un niño no conflictivo, yo no podría decir a qué magnitud de noble es Freddy, es noble, es un muchachito que nos está doliendo mucho esa ida, en qué manera acabó es lo que nos está doliendo”.
Los restos mortales de Freddy fueron trasladados vía aérea a la Base Aeronaval, para después ser llevados a la casa de su familia, ubicado al norte del estado, donde ya estaba siendo esperado por sus seres amados.