El presidente Andrés Manuel López Obrador recorrió este sábado las instalaciones donde se construye el Aeropuerto Internacional “General Felipe Ángeles”, en Santa Lucía, donde adelantó que la reutilización de materiales y el tipo de suelo generarán un ahorro total de 100 mil millones de pesos.

En la supervisión lo acompañaron el gobernador del Estado de México, Alfredo del Mazo, y el titular de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), el general Luis Cresencio Sandoval. A las tres autoridades de gobierno se les explicaron los avances que se llevan a 44 días de inicio de los trabajos, que consisten en 1% del total de la obra y un ejercicio presupuestal de 57 millones de pesos.

Entre los materiales que se reutilizarán de la construcción de lo que hubiera sido el Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM), en Texcoco, están materiales granulares como arena, grava y asfalto, también algunos perles de acero, subestaciones, transformadores, cables y hasta los campamentos; por lo que, según informaron, se está “reconvirtiendo el diseño original a los perles de Texcoco, para darles un buen n a los materiales”.

Además, autoridades castrenses señalaron que este martes tendrán una reunión de trabajo para afinar los detalles y llevar los materiales desde Texcoco. Incluso, señalaron, que de la demolición de algunos edificios militares que se encuentran en unidad, también se reutilizarán.

López Obrador destacó que el tipo de suelo sobre el que se construye Santa Lucía es el mayor factor de abaratamiento de costos, pues en lugar de excavar casi 30 metros para encontrar suelo firme –como ocurría en Texcoco por su condición húmeda–, en Santa Lucía solo se excavaron cuatro metros.

El general ingeniero Gustavo Vallejo, encargado general de la obra, explicó que en Texcoco “se estaba llevando a cabo un experimento de relleno muy costoso que iba a llevar mucho tiempo”; el Presidente indicó que se hubieran necesitado reparaciones y mantenimiento al menos cada tres años, para evitar hundimientos

“Los asentamientos referenciales en esos 30 metros tienen características peores que las de nosotros, por eso esas pistas iban a ser de concreto flexible y cada dos o tres años se necesitaban reencarpetar. Una sola pista costaba 10 mil 500 millones de pesos, en carpeta asfáltica de 700 mil metros cuadrados. La de nosotros representa más de tres millones de metros cuadrados con un costo de siete mil 700 millones de pesos”, dijo Vallejo.

El Presidente añadió que con la obra en Santa Lucía, los aeropuertos Internacional de la Ciudad de México (Benito Juárez) y el Internacional de Toluca, no tendrán que cerrar sus funciones.