#Nacionales Se venden y vendieron como pan caliente los “cachitos” para rifa del avión presidencial

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«Quién le dice que no a 20 millones; hasta yo los quiero», dice Maribel, una de las dependientes de Casa Molina, local de pronósticos y venta de billetes de lotería, ubicada en la calle López en el Centro Histórico de la Ciudad de México; afirma que los ‘cachitos’ para la rifa del avión presidencial están volando.

Maribel atiende a la clientela que con ilusión paga los 500 pesos del costo del ‘cachito’ de la rifa que se realizará el 15 de septiembre, y que entregará 100 premios de 20 millones de pesos cada uno.

«Aquí vienen y eligen los billetes conforme a lo que ven ahí en el aparador, pero de verdad es pura suerte. Lo que hemos visto aquí ni te imaginas, es pura suerte», dice.

En el local, Federico mira el aparador, lee los números que están disponibles; «estoy considerando comprarlo, nomás que tenga dinero porque es de quinietón».

Federico, quien dice ser originario de Córdoba, Veracruz, afirma que siempre ha jugado a la lotería con la esperanza de algún día «pegarle al gordo».

«La verdad le he pegado como 50 veces, pero la verdad, la verdad puros premios culerillos, de 300, de 500, de mil varos, el más grande de 10 mil varos», indicó.

«Una vez, por allá en los sesentas, me gustó un número, pero no tenía yo ni pa’ comer y costaba 50 pesos y no jugué, no tenía trabajo y me habían corrido de mi casa. En esos años nomás se rifaban en diciembre 10 millones».

Al preguntarle sobre su método de elección de números, dice que siempre se guía por las listas de premios, con base en eso, siempre busca los número que no han salido. Sobre la rifa del avión presidencial, cuando compre su billete, asegura que buscará el 7 y el 0.

«El programado para mí es el 7 y el 0; el 0 no ha salido y el 7 lo vengo persiguiendo como desde hace 4 meses y ni madres; entonces para mí está programado el 7 y el 0. El 9 está sale y sale».

Don Federico comenta que todos sus familiares jugarán, comprarán seis billetes; el motivo adicional para jugársela es también para apoyar la causa del presidente López Obrador.

«Al mismo tiempo también apoyo la causa, porque para mí, este señor (el Presidente) les está rompiendo la madre a los señores masones. El PRI pertenece a una poderosa organización de masonería. La masonería práctica la fraternidad, pero entre ellos nada más; pa ti, pa mí; pa ti, pa mí, ¿y el pueblo? ¡Qué chingue a su madre! Entre ellos se reparten las riquezas de nuestro hermoso país; vende patrias, venden todo para darse vida de reyes sin trabajar, viven de los pendejos», dice.

«Por apoyar a la cusa del gobierno»

José Luis Cedeño también compró su ‘cachito’ para la rifa Casa Molina; después de recibirlo, celosamente abre su maletín y lo oculta entre las hojas de una carpeta.

¿Tiene confianza en pegarle?

«La verdad con tal de ayudar; por apoyar a la cusa del gobierno, porque no es igual este gobierno con los gobiernos saqueadores neoliberales que no les importa el pueblo», dice.
Don José Luis Cedeño dice que espera comprar tres billetes, «ahorita uno, mañana voy por dinero y compro otro, y pasado otro».

Sobre su método de elección de números afirma que los últimos han tenido un 0 en medio.

«Normalmente he visto que números con 0 en medio sacan el premio, y ahorita es lo que busco yo; ya lo busqué y ya lo llevo; voy a venir a buscar otro con 0 en medio».
Rifa del avión presidencial opaca otros sorteos (Alberto Evangelista)

Sobre la regularidad con la que participa en los juegos de lotería, se dice un asiduo, sólo que nunca se ha ganado un buen premio, «a chiquitos nada más le he pegado».

Rosario, otra de las dependientas de Casa Molina, asegura que los billetes para la rifa del avión presidencial están siendo muy solicitados, «la gente los está buscando y lo está comprando. Se está vendiendo mucho, ahorita es el que está jalando».

Dice, que incluso, la rifa del avión está opacando a otros sorteos como el del programado para el 18 de marzo.

Casa Molina tiene más de 30 años vendiendo billetes y recibiendo juegos de pronósticos; uno de sus clientes asiduos fue el actor mexicano Alfonso Zayas.

«El domingo vendimos el premio mayor, el del Zodiaco que entregó 7 millones de pesos», confiesa Rosario.
Sobre si alguno de los ganadores ha regresado al local para darle alguna gratificación por venderle el número ganador, dice: «apenas se reportó un señor; gracias a dios me dio».

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