La cifra de muertos en México se elevó este miércoles a 174 a causa del COVID-19 y la de casos confirmados a 3.181, informaron las autoridades sanitarias.
En las últimas 24 horas, el número de fallecimientos aumentó en 33 y el de nuevos casos confirmados alcanzó casi los 400 (396), el mayor número desde que se presentó el primer caso en México el 27 de febrero.
Las autoridades precisaron que existen 9.188 casos sospechosos, y 17.209 negativos en 29.578 casos estudiados y la mayoría de las defunciones han ocurrido en la Ciudad de México.
Ante estos datos, el director general de Epidemiología de la Secretaría de Salud, José Luis Alomía Zegarra, señaló que el número de casos y decesos “muestran una tendencia ascendente clara”.
Remarcó que se ha notado en la última semana que la tendencia es ascendente “y aunque no se duplica” en las gráficas “se hace representativa día con día (y se ve que) hay un incremento”.
Alomía apuntó que del total de los casos confirmados hasta ahora, el 71 % ha requerido tratamiento ambulatorio por presentar síntomas “leves” y el restante 29 % han sido hospitalizados y están clasificados como estables, graves e intubados.
Explicó que a nivel nacional la tasa de incidencia de casos confirmados es de 2,48 por cada 100.000 y la entidad donde se ha presentado “la mayor tasa de incidencia” es la Ciudad de México (9,48), seguida de Baja California Sur (8,45).
Por su parte, la tasa de letalidad por cada 100 casos es de 5,46 y la entidad con mayor tasa de letalidad es el estado de Durango (26,67), mientras que la entidad con la menor tasa es Guanajuato (1,49).
El subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell, expuso que el número de casos contagiados “es la información más básica” que pueden obtener las autoridades.
“Lo más importante es cómo los científicos utilizan esos datos para interpretar o descubrir el comportamiento de la epidemia en México”, lo cual les ayuda en la toma de decisiones, añadió.
López-Gatell reiteró que “la epidemia está en fase ascendente; no vamos a detener la enfermedad, solo vamos a lograr reducirla si nos quedamos en casa”.
Agregó que en México las personas “no están llegando a las salas de espera”, y están haciendo caso de que si no tienen comorbilidades o son mujeres embarazadas o no presentan síntomas graves, han optado por quedarse en casa a recuperarse.
Hasta el 30 de abril en México, las autoridades sanitarias ordenaron el cierre de escuelas, suspensión temporal de actividades, restricción de reuniones masivas, medidas específicas de protección para personas de riesgo más vulnerable, que son los adultos mayores, embarazadas y personas con enfermedades crónicas.