La administración federal actual otorgó 90% de los contratos por la vía directa o invitación restringida, lo que abre paso a la opacidad y corrupción, por lo que modificar la Ley de Adquisiciones al vapor aumentará ese riesgo, indicó la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex).
El presidente de la Confederación, Gustavo de Hoyos, expuso que ante la posibilidad de que se modifique la Ley de Adquisiciones al “vapor” es necesario que se adopten 10 principios rectores para cualquier discusión de iniciativa de reforma de leyes como son la transparencia, ya que el proceso debe ser una caja de cristal desde la planeación hasta el último peso que pague el gobierno.
“En Coparmex advertimos que el apresurado intento por legislar la reforma a la Ley de Adquisiciones va en contra de todos y cada uno de estos 10 principios propuestos, mismos que provienen de las mejores prácticas internacionales”, expuso el líder del sindicato patronal.
Se sabe que este lunes, diputados aprobaron un período extraordinario para aprobar reformas a la Ley de Adquisiciones por las que se pretenden importar medicinas sin licitación pública.
Ante ello, De Hoyos expuso que actualmente 9 de cada 10 contratos se otorgan por invitación restringida o adjudicación directa, algo que preocupa porque un funcionario decide a quién le comprará, como se hace en el Tren Maya y la refinería Dos Bocas.
El problema es que ahora tratan de hacer cambios para la compra de medicinas y “las contrataciones públicas de un país democrático pueden ser una gran palanca de desarrollo. Con la salud no se juega y menos a costa de nuestras familias”, añadió.
En videoconferencia explicó que apoyarán “leyes que promuevan el mejor uso de los recursos públicos en el corto, mediano y largo plazos”.