Durante unos años México era una potencia para crear vacunas por su propia cuenta, pero el periodo neoliberal terminó con ello.
Carrillo Farga, profesora del departamento de Salud Pública de la UNAM, platicó para El País sobre el pasado farmacéutico de México.
Explicó que para la década de los 40, México era autosuficiente en el sector de las vacunas. Incluso en tiempos previos a la Revolución.
En 1943, la Asociación Americana de Pediatría aceptó la vacuna contra la tosferina. México la producía desde 1940. Y a finales de los ochenta exportaba a 15 países sus biológicos.
“México fue autosuficiente en la producción, control, almacenamiento y distribución de vacunas y se desarrolló todo un discurso a favor de la producción pública, se impulsaron las instituciones, se establecieron precios ajustados a los costos”, detalló.
Era un buen momento político. Algunos científicos iban a estudiar las técnicas a la Fundación Rockefeller, como Ruiz Castañeda y Gerardo Varela, resaltó.
El neoliberalismo y Zedillo terminaron el momento
Fernando Ramos, profesor de la facultad de Medicina de la UNAM, explicó para el medio español que la actualidad es diferente, desde que entró el vigor el periodo neoiberal.
“La producción ahora es mínima, más del 90% de las vacunas que se aplican en México provienen del sector privado, La UNAM está trabajando en su vacuna contra la covid-19, pero no es lo mismo hacerlo en un laboratorio para probar en animales que producir para millones de personas”.
Leal Fernández, de la Universidad Autónoma de México (UAM), señaló que en el periodo presidencial de Ernesto Zedillo, la política industrial permitió que se pervirtiera el sector farmacéutico.
El sector de los medicamentos ha sido uno en los que más dinero turbio se ha movido. En el México de Ernesto Zedillo (1994 – 2000) se decía que la mejor política industrial era no tener política industrial.
Sentenció que los 36 años de neoliberalismo, estuvieron minados por la corrupción. “Surgieron unos oscuros intermediarios entre el poder político y el sector farmacéutico”.
Con información de revoluciontrespuntocero.mx