Otro nuevo reto en la construcción del Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (NAICM) se ha presentado tras toparse con montañas de basura en el terreno de construcción.
En la zona designada para la edificación de la obra arquitectónica, se registran toneladas y toneladas de residuos tirados por personas que viven cerca de la zona.
La inversión que requerirá el retiro del montículo de desechos oscilará entre los 365 millones y los mil 37 millones de pesos, de acuerdo con distintas constructoras que han ofrecido sus servicios y han dado sus cotizaciones.
Las 85.3 hectáreas del Lago de Texcoco que ocupará la nueva terminal se encuentran totalmente pobladas de basura que tendrán que ser cargadas, acarreadas y descargadas en un lugar especial para poder continuar con la construcción.
Se trata de 2.1 millones de metros cúbicos de desechos no clasificados que fueron arrojados sin control en un tiradero conocido como ‘Caballerizas’, los cuales deberán retirarse antes de nivelar el terreno.
Funcionarios del Grupo Aeroportuario de la Ciudad de México declararon;
Este depósito fue producto de acumulación de materiales colocados sin ninguna clasificación”.
Con información de Reforma.