El equinoccio de primavera, uno de los dos que ocurren en el año, se producirá este sábado a las 22:30 horas, cuando el sol forme un eje perpendicular con el Ecuador.
Ernesto Vargas del Instituto de Investigaciones Antropológicas (IIA) de la UNAM, mencionó que en el calendario mesoamericano la primavera era más que un cambio de estación: para los mayas ese evento significaba la planeación de la siembra.
En la actualidad el equinoccio de primavera y otros fenómenos como el solsticio son observados e diferentes sitios de la península de Yucatán y Mesoamérica como en la escalinata de El Castillo de Chichén Itzá.
Otras zonas arqueológicas representativas son Dzibilchaltun, al norte de Mérida; Mayapán, al norponiente de Yucatán, o Uaxactún, en Guatemala, cuya agrupación de edificios se alinean de tal manera que pueden funcionar como observatorios astronómicos.
Este conglomerado de edificios –del Preclásico tardío (400 a.C.-200 d.C.)– son conocidos como Grupo E y “consiste en una estructura piramidal desde donde se observa.
