Sin duda el partido más esperado era el clásico nacional, en el partido de vuelta, ambas escuadras no se hicieran daño en las porterías, pero sí dejaron incompletos a sus planteles, Rubens Sambueza, por parte de las águilas, y Jesús Zavala, por los rojiblancos.

América y Chivas dieron un gran juego, digno de ser un clásico de liguilla, el partido comenzó intenso desde los primeros minutos de juego, apenas al minuto 5, Jair Pereira reventaría el travesaño, tras un gran remate de cabeza; minutos más tarde,  Orbelin Pineda tomó el balón en los linderos del área y sacó una raya fulminante, venciendo a Hugo Gonzales.

En ese momento América estaba sobre la lona, las circunstancias del encuentro ahora les pedía dos goles para avanzar a la semifinal. Al minuto 26, por medio de un claro penal, el América emparejaría el marcador; Osvaldo Martínez cobró una pena máxima, cometida por Jesús Sánchez a Darwin Quintero.

Chivas estaba sacudido y tuvo una oportunidad de oro para poner cuesta arriba al cuadro de Coapa, cuatro minutos después del empate, Hugo González derribó a Pineda dentro del área, cometiendo  una pena máxima a favor del visitante; Gullit sería el encargado de cambiar la falta por gol, pero estrelló su disparo en el larguero.

Chivas se bloqueó en ideas futbolísticas, generando pocas llegadas a gol, lo cual aprovecharon los dirigidos por Ambríz. Al minuto 64, en una gran jugada, el  América movió el balón por todo lo largo de la cancha en un contragolpe de antología, Darwin Quintero asistió con un gran centro a Oribe Peralta, quien empujó el balón con pierna derecha.

De esta forma el clásico nacional no quedó a deber, dándonos un partido de alarido, lleno de emociones y dramatismo. América enfrentará a Monterrey, encuentro que presume ser una final adelantada.

Pachuca impone localía

El último invitado a la siguiente ronda saldría de la llave de entre Pachuca y Santos, quienes empataron a un gol en el “Templo del Desierto”.

Sin duda el partido de vuelta entre estos dos equipos fue mucho mejor que su primera parte, los equipos arriesgaron, lucharon y se murieron en la raya; nos regalaron  un partido lleno de emociones y con tintes dramáticos.

El primer gol fue obra de Urretaviscaya al minuto 9,  tras una gran jugada de Lozano.

Santos no la estaba pasando bien en el terreno de juego, pese a esto, lograron empatar al 15; Andrés Rentaría remató de cabeza tras una gran asistencia de Abella.

Con este marcador los Tuzos seguían teniendo el pase a semifinales, pero no podían confiarse, pues un gol más de los laguneros obligaría a ellos a hacer dos más. Pachuca entendió esto y no dejó de pisar el acelerador, Urretaviscaya aprovechó una falta en los linderos del área, cobró de manera magistral el tiro libre, su disparo superó  la barrera y se incrustó en las redes laguneras.

Urretaviscaya fue el hombre de la noche y en una jugada llena de velocidad dribló a varios rivales y asistió a Franco Jara quien hizo un buen remate para poner 3 goles a 1 los cartones.

Santos no quería dejar muy barata la serie y al 84 el Pulpo González pondría tensión en el encuentro, al marcar el segundo tanto para los del norte.

El cuadro Auriverde estuvo cerca de empatar la serie, pero no le alcanzó y al final el equipo Tuzo avanzó y se encuentra en la antesala de la final, su siguiente rival en turno serán los panzas verdes de León.