Apenas unos días después del juicio “Blanca” recibió amenazas de muerte

Una mujer llamada “Blanca” -la llamaremos así por cuestiones de seguridad-, sufrió una violación en Durango. A pesar del miedo que sintió al momento de la agresión se atrevió a denunciar, acudió con las autoridades, pero se topó con los cambios del Nuevo Sistema de Justicia Penal.

“Blanca” identificó a su agresor y así lo destacó en un juicio oral, contó a detalle su tragedia y aún así, el juez decidió que los dos -víctima y agresor-, tenían tres meses para presentar pruebas sobre el caso. Como si las marcas y los daños causados a la mujer no fueran suficientes.

Los dos salieron de ahí, cada quien con un plan diferente en la cabeza. Nunca esperaron como terminaría la historia.

Apenas unos días después del juicio, “Blanca” recibió amenazas de muerte, le advirtieron que irían por su familia si seguía con la demanda para hombre que la violó. La impotencia la invadió ¿acaso alguien arriesgaría a su familia por una demanda? La mujer decidió no regresar al juzgado y su caso, como muchos otros, quedó impune.

El Nuevo Sistema de Justicia Penal favorece a los delincuentes, si no hay una víctima, no hay un delito. El violador quedó libre y tal vez vuelva a violar, pero seguro ocurrirá lo mismo. Casos como este empiezan a replicarse a lo largo del país sin que se ponga atención el los huecos que tiene la ley. Por proteger los Derechos Humanos de los delincuentes, se descuida a las víctimas.

Además, este “nuevo” sistema penal, de acuerdo con el abogado Germán Cruz en entrevista para Letra Roja, no funciona del todo bien, tiene muchas lagunas y se van a liberar muchos delincuentes.

Si alguien comete un delito puede quedar en libertad casi de inmediato si no hay una víctima. La mayoría los amenaza de muerte para que ya no vayan. Hay otros casos, por ejemplo los homicidios, donde si no se presentan los familiares de la víctima, el homicida queda en libertad. No hay cuerpo, no hay denuncia, no hay delito.

Lo peor de todo es que la figura de libertad bajo fianza fue cambiada por libertad bajo reservas de la ley, es decir, que cualquiera puede quedar libre sin pagar un solo peso.

“Algunos cambios están bien, pero las autoridades deben verificar que este nuevo sistema no aplica en una sociedad como la mexicana y menos, en la situación que estamos viviendo”.

FUENTE : LETRA ROJA