Caminar por las calles del municipio de Naucalpan es andar en medio de robos, extorsiones, secuestros, asesinatos y narcotráfico. La inseguridad en el lugar es un tema que las autoridades no han atendido desde hace una década. Y mientras los crímenes van a la alza, el presidente municipal, Edgar Olvera, anda de fiesta.
Los rumores entre los vecinos de Naucalpan sobre los vínculos de los policías municipales con el crimen organizado son constantes. Y sí, el alcalde confirmó la separación del cargo de 278 elementos de la Dirección General de Seguridad Ciudadana y Tránsito de Naucalpan por presuntos vínculos con la delincuencia y aseguró que el 10 por ciento de la policía de la entidad son corruptos.
A dichos agentes los separaron de sus funciones policiacas, los desarmaron y únicamente realizan trabajos administrativos dentro del cuartel policiaco sin mantener contacto con la ciudadanía. Además enfrentan un proceso penal por actos de corrupción, antecedentes penales y presuntos vínculos con el crimen.
Vecinos de Naucalpan comentaron que quienes “cometen los secuestros en Naucalpan son los mismos policías”. Últimamente “salimos pero en quienes menos confiamos son en ellos”.
Ante la ola de violencia, Edgar Olvera aseguró que los delitos por narcomenudeo y crimen organizado corresponden al gobierno federal, mientras que la prevención y otros delitos, como fraudes o daños a propiedad ajena, al gobierno local del Estado de México.