Ante el riesgo de que la inflación llegue a su meta a un ritmo más lento del esperado, la junta de gobierno del Banco de México (Banxico) decidió por unanimidad incrementar en 25 puntos base la tasa de referencia para colocarse en 7.75 por ciento.
“Se ha acrecentado el riesgo de que la inflación presente un ritmo más lento de convergencia a su objetivo que el previsto anteriormente, lo que podría retrasar el logro del objetivo de 3% de no modificarse la postura monetaria”, advirtió en el anuncio de política monetaria.
El dos de febrero de este año, fue la última vez que la junta de gobierno aumentó en 25 puntos base, el objetivo para la Tasa de Interés Interbancaria a un día.
Así en lo que va del año el apretón monetario acumula un incremento de medio punto, dosis que ayudará a despresionar el tipo de cambio y por ende la inflación para que pueda converger hacia el objetivo del 3% esperado.
Advirtió que se ha observado una mayor depreciación del tipo de cambio y presiones sobre los precios de las gasolinas y del gas L.P. asociadas a incrementos en sus referencias internacionales.
En cuanto a los aranceles impuestos por Estados Unidos y las medidas equivalentes anunciadas recientemente por México, estimó que su impacto sobre la inflación será acotado y de corta duración, reiteró.
Por otro lado, mencionó que los indicadores oportunos para el segundo trimestre sugieren cierta desaceleración de la actividad económica.
Del tipo de cambio, Banxico expuso que el peso presentó una depreciación adicional y un aumento en la volatilidad, comportamiento que estuvo influenciado tanto por el entorno externo adverso como por otros factores como la falta de acuerdos en el proceso de renegociación del tratado de Libre Comercio de Norteamérica (TLCAN) y la incertidumbre asociada al proceso electoral.