Como una auténtica “llamarada de petate” lleva la campaña por el PRI-PV-PANAL en el Distrito XXXVIII Carla Morell Islas, quien no ha podido siquiera darse a conocer dentro de los 4 municipios que están dentro de este distrito electoral federal, en donde su mayor mérito fue haber trabajado en la administración municipal 2009-2012 que ha sido catalogada por los texcocanos como una de las más corruptas de la historia de este municipio.
Incluso dentro de sus propuestas ha dejado un tanto de lado la lucha contra la corrupción, en la cual ha dicho que “todos estamos hasta la madre”, ya que en diversos eventos ha sido cuestionada sobre su actuación dentro del cabildo municipal cuando gobernaba Amado Acosta García y a pesar de que en varias ocasiones ha negado haber participado en actos de corrupción, pues simplemente como regidora con la comisión de obras públicas, pues simplemente nadie le cree y por tanto ha enfocado su campaña en otras cosas como; la violencia de género y la igualdad de género, la creación de empleos, entre otras cosas, pero cuando retoma la cuestión de la corrupción, pues ni sus propios correligionarios del PRI le creen.
Pasan y pasan los días y ella y si equipo de campaña no ha sido capaz de medio posicionarla entre la población, en una campaña totalmente cerrada, sin logística y menos organización y no se diga la interrelación con los medios de comunicación a los cuales esta persona ha relegado y sí se quiere saber un poco de ella, pues solamente en las redes sociales, ya que simplemente “anda desaparecida”.
La única ocasión en que se digno invitar a los periodistas e incluso dar alguna entrevista fue cuando inicio su campaña en busca del voto, hace casi ya dos meses cuando entre bailes y festejo junto a unos 100 priístas de los cuatro municipios. Ahí tomo el micrófono y despotrico contrala corrupción, cosa que en esa ocasión y ante puro priísta pues dicho gesto fue aplaudido. Sin embargo, ya en otros lados y ha sabiendas que ella fue regidora de obras en el ayuntamiento con Amado Acosta, mejor ha optado por salirse por la tangente.
De ahí pues simplemente se ha ocupado de hacer su campaña con sus más cercanos colaboradores e incluso, a decir de algunos priístas, sus modales y su forma de tratar a la gente no ha cambiado, desde aquellos donde mucha gente la tachó de pedante, déspota y prepotente.
Incluso, mucha gente se sigue cuestionando si ella es verdaderamente de Texcoco y si lo es, pues casi toda su carrera política y laboral la ha desarrollado fuera de Texcoco o sus alrededores, en donde según su currículo, su trabajo ha sido en la administración pública estatal, pero según los entrevistados, esta persona deja mucho que desear y si se dice servidora pública pues simplemente “no sabe tratar a las personas”.
Finalmente, se indicó que la colocación de Carla Morell como candidata a la diputación federal por el Distrito XXXVIII, al parecer no es más que otra de las triquiñuelas del PRI estatal, para que este partido en la zona y más que nada en Texcoco siga hundido, ya que pues no cuenta con carrera política, trabajo comunitario o político y la conocen seguramente únicamente quien la puso como candidata,lamentablemente no solo en Texcoco pasó esto sino en muchos lugares del Estado de México.
