En silencio total y tras gran fracaso mundialista, Chivas arribó la noche del miércoles a Guadalajara para romper filas y comenzar los días de descanso decembrinos.
El equipo llegó encabezado por Amaury Vergara y José Luis Higuera, directivos del cuadro tapatío, quienes no quisieron hablar sobre el desastre que resultó el viaje a Emiratos Árabes Unidos.
Chivas culminó en la sexta posición de siete equipos luego de perder en Cuartos de Final ante el Kashima Antlers de Japón y caer en penales ante el Esperánce de Túnez en el duelo por el quinto lugar.
Híguera fue uno de los primeros en salir y evitó a toda costa a los medios de comunicación presentes, al igual que Vergara hijo. Quien sí compareció fue el director deportivo, Mariano Varela.
“Sentimos vergüenza por haber hecho un papel tan malo, no se cumplieron objetivos, hay que dar la cara y hay gran molestia en cuerpo técnico, directivos y jugadores”, expresó el directivo.
Uno a uno los jugadores fueron saliendo de la terminal aérea incluyendo a los que ya no forman parte del equipo como Orbelín Pineda, quien solo reiteró el agradecimiento a la afición del Guadalajara luego de ser traspasado a Cruz Azul.
“Siempre me han enseñado a buscar títulos y a eso voy a Cruz Azul”, indicó el volante mexicano.
Así, Chivas volverá a los entrenamientos en una semana con la intención de cambiar la cara en el Clausura 2019.