Recorrer la franja fronteriza, regularizar autos “chatarra” dañará a la industria automotriz, a la economía mexicana, además de provocar deterioro ambiental, dijo Gustavo de Hoyos, presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex).
Las políticas anteriores no ayudarán a terminar con el problema de incremento de vehículos internados ilegalmente al país, a los que se les llama “autos chocolate” que muchas veces son chatarra por sus años de antigüedad y sus condiciones obsoletas.
“Si se quiere acabar con el contrabando de vehículos, se debe incluir un planteamiento integral del problema que aborde la necesidad de crear transporte público digno y de calidad para aquellos que no tienen acceso a ingresos que les permitan comprar autos”.
En el primer semestre de 2018 la industria automotriz registró 8% de disminución de sus ventas de vehículos ligeros y decreció 9% la de automóviles pesados.
El líder patronal dijo que le preocupan los programas de regularización de “autos chocolate” y la propuesta que “esbozó” el futuro gobierno federal de recorrer 30 kilómetros hacia el sur las aduanas de la frontera norte para crear una zona franca.
Así como la reciente propuesta de algunos gobernadores de regularizar la circulación de estos autos mediante un engomado.
“En el contexto actual, la introducción anárquica de vehículos usados sólo crea una competencia desleal e indirecta con los vehículos producidos en el territorio nacional, que transfiere recursos al exterior, sin ningún impacto positivo en la economía del país”, expuso.
Por ello hizo un llamado a los gobernadores a “reconsiderar y desistir de la propuesta de regularizar autos por los efectos adversos que se tendrían, como lo visto de 2006 a 2008 cuando la Asociación Mexicana de Distribuidores Automotores documentó que la venta de vehículos importados usados, sobrepasó las ventas totales de unidades nuevas de todo el país”, señaló.