Además, el Legislativo local aprobó un plan de estructuración de deuda presentado por el gobernador Alfredo del Mazo.
El Congreso del Estado de México aprobó este miércoles reformas a la Ley de Seguridad Social para los Servidores Públicos del Estado de México y Municipios, que, entre otras cosas, incrementa de 62 a 65 la edad mínima de jubilación entre los servidores públicos de la entidad.
Además, el Legislativo aprobó una iniciativa enviada por el gobernador Alfredo del Mazo para reestructurar la deuda pública del estado, que asciende a 43 mil 600 millones de pesos, en una sesión que duró sólo 20 minutos.
El dictamen de la iniciativa señala que el propósito es “garantizar la viabilidad del instituto que atiende a más de 375 mil servidores públicos y casi 60 mil pensionados, así como la cobertura y calidad de sus servicios y que ningún servidor público o pensionado pierda derechos adquiridos”.
El diputado priista Rafael Osornio Sánchez justificó el aumento de la edad mínima de retiro argumentando que existe un desequilibrio entre ingresos y el costo de las prestaciones debido al aumento de la esperanza de vida, el envejecimiento de la población económicamente activa, el crecimiento de la población de pensionados respecto al número de trabajadores cotizantes y la diferencia entre el importe de pago de pensiones respecto del salario promedio de los servidores públicos.
Este nuevo modelo, agregó, se mantienen las pensiones por viudez, orfandad y asistencias, además de que los trabajadores podrán elegir entre el sistema de retiro actual o uno nuevo con cuentas individuales y aportaciones voluntarias, como se maneja en el sector privado.
Tras la votación, el perredista Arturo Piña lamentó que no se atendiera las causas que pusieron en aprietos las finanzas del organismo, y alertó que los servidores públicos que cambien su pensión a la nueva modalidad tendrán dificultades para obtener un retiro digno y se verán obligados a trabajar más años.
Con información de Notimex