A cuatro meses de que empezó a operar la norma emergente de verificación vehicular en la Megalópolis, es necesario evaluarla para conocer sus alcances y beneficios en favor de una mejor calidad del aire, señaló el presidente de Red Acción Ambiente A.C., Pedro Javier Pliego Castil.
El ambientalista urgió a las universidades y planteles de educación superior a participar en dicho proceso de análisis, pues cuentan con el capital humano para llevar a cabo esa labor.
La verificación vehicular, explicó, no es una medida propicia para disminuir las emisiones contaminantes en la atmósfera, ya que se limita a un requisito administrativo, el cual requiere de varios trámites como el pago de la tenencia y hacer largas filas para acreditar el proceso de medición de emisiones.
No obstante, sostuvo que la verificación vehicular es una obligación de los ciudadanos del Estado de México, porque así lo estipula la ley, pero no todos los automovilistas o transportistas cumplen con ello.
“No es sólo verificar y ya se acabó el problema de la mala calidad del aire, en consecuencia, los usuarios adquieren un permiso para contaminar”, comentó.
Consideró que es importante que los propietarios de automóviles conozcan si se está dentro o fuera de norma, pero no debe limitarse sólo a esa medida para disminuir la contaminación atmosférica sino ir más allá.
En ese contexto, expresó que las universidades y la sociedad civil deberán participar en el análisis y cumplir con otras acciones en favor del medio ambiente, por medio de una visión amplia y holística.
La verificación vehicular, apuntó, si es sólo un negocio sería mejor no hacerlo y que tuviéramos políticas más innovadoras y prácticas a la altura de los tiempos, a través de una educación y cultura ambiental así como esquemas más transparentes y accesibles.
