El fraude electoral de 2018 es posible, pues se opera desde las entrañas del Instituto Nacional Electoral (INE) que se alista para nombrar a un ganador el 1 de julio antes de la media noche que, además no será el que pueblo mexicano elija en las urnas, dijo Jorge Alberto López Gallardo, profesor de Física Nuclear de la Universidad de Texas en El Paso (UTEP).
La operación para consumar el fraude durante la noche del 1 de julio y la madrugada del 2 de julio ya se echó andar, afirmó, pues el INE se empeña en dar a conocer a un candidato con ventaja sobre los otros a las 11 de noche el día de la elección, únicamente con 12 por ciento de las casillas computadas, explicó el investigador que formó parte de un equipo de observadores electorales no oficiales que analizaron los números de las elecciones presidenciales de 2006 y 2012, y que concluyó, en ambos casos, que hubo fraude electoral.
El INE, explicó en entrevista con SinEmbargo, ya anunció lo que llamó “PREP [Programa de Resultados Electorales Preliminares y el Conteo Rápido] de nueva generación”, con tecnología de punta, pero manipulable, explicó el investigador que en 2012 afirmó que se preparaba fraude electoral para hacer que Enrique Peña Nieto, el entonces abanderado del Partido Revolucionario Institucional (PRI) ganara.
Hoy se prepara un gran fraude para que José Antonio Meade Kuribreña, el abanderado de la alianza entre el PRI, Partido Verde Ecologista de México (PVEM) y Partido Nueva Alianza (Panal), quedé en primer lugar sobre el puntero en las encuestas Andrés Manuel López Obrador, candidato de la coalición entre Movimiento Regeneración Nacional (Morena), Partido del Trabajo (PT) y Partido Encuentro Social (PES), aseguró.
“Tienen el control y eso les resulta en muchas ganancias, mucho dinero. Eso no lo van a soltar. Lo único que tienen que hacer es ajustar los números a lo último”, dijo.
El investigados explicó que se trata de un “sistema de modificación de datos” creado en 2006 por una empresa propiedad del cuñado del ex Presidente Felipe Calderón Hinojosa, Diego Hildebrando Zavala, que se utilizó para llevar a la silla presidencial al esposo de Margarita Zavala Gómez del Campo, hoy candidata independiente a la Presidencia de la República, y después a Peña Nieto en 2012.
“Este sistema de modificación de datos lo pueden usar tanto para el PAN [Partido Acción Nacional] como para el PRI. Inicialmente pensaba que lo usarían para Margarita Zavala, pero al PAN se le fue de las manos. Es posible que estén trabajando para que se vuelva aplicar el mecanismo a favor de Meade”, explicó.
El profesor de la Universidad de Texas recordó que en 2012 se dio una “pugna de fraudes”; el fraude “a la antigüita con la compra del voto” y el “fraude cibernético”, que un grupo de investigadores mexicanos que se hizo llamar “Los Anomaleros”, entre ellos López Gallardo, analizó y documentó.
“Se dieron ambos a favor de Peña Nieto. Se puede detectar la firma electrónica del fraude; esto vieron varios investigadores. La manera en la que se da la cuestión cibernética es la modificación de los datos: modifican los datos del PREP, los cambian para presentarlos y dar una imagen equivocada a la gente, para que la gente piense que va a ganar tal o cual. Son números creados a voluntad de quien lo está haciendo. Lo hemos visto porque no tienen la firma estadística que deberían de tener. Tiene unos cambios que no son posibles de acuerdo con un serie de reglas estadísticas que se deben satisfacer. Los números que presentó el IFE [Instituto Federal Electoral ahora INE] no satisfacían estas reglas, tanto los del PREP, como los de conteo distrital”, explicó.
El investigador, quien también prepara un libro en donde profundiza en la elección de este año y explica los fraudes electorales de 2006 y 2012 que será lanzado tentativamente en abril, explicó que el fraude ya está en marcha. Inició con flujo de dinero ilícito para usarse en propaganda y compra del voto, y para comprar encuestas arregladas que acercarán poco a poco al “candidato seleccionado” al puntero Andrés Manuel López Obrador.
Luego vendrá una cargada en contra de López Obrador encabezada por “expertos” de renombre que estarán preparando adjetivos para denostar a López Obrador.
El software para el robo de la elección se instalará el “algún servidor secreto”, unas semanas antes de los comicios del 1 de julio y se formarán los grupos para la compra de votos.
El 1 de julio se echará andar la maquinaria para la sustitución de representantes de casilla, los acarreos, la intimidación a votantes, la compra de fotos de boletas electorales, el embarazo de urnas y hasta “el robo y quema de urnas”.
A las 11 de la noche de ese día, el INE –con tan sólo 12 por ciento de las casillas– declarará perdedor de la contienda a López Obrador y durante la noche se abrirán paquetes y se remplazarán boletas electorales para consumar el fraude electoral.
Fuente: Vanguardia