Puede que te guste el chocolate, pero probablemente deberías prepararte para decirle adiós: los científicos de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica de EUA (NOAA) han predicho que las plantas de cacao probablemente se extinguirán en 2050 debido al cambio climático. Pero hay una remota esperanza en el horizonte: Mars, la compañía de dulces que elabora golosinas de chocolate como Snickers y Twix, se ha asociado con la Universidad de California para crear un nuevo método que puede ayudar a salvar cultivos de cacao futuros.
La mayor parte del chocolate del mundo proviene de África occidental – las plantas prosperan en los bosques lluviosos de la región – pero en los próximos 40 años, las crecientes temperaturas de la Tierra empujarán a las granjas de cacao a las montañas, hacia áreas no aptas para el cultivo o ya establecidas como reservas de vida silvestre.
Sin embargo, un nuevo esfuerzo de la Universidad de California Berkeley está utilizando la tecnología CRISPR para modificar el ADN de las plantas de cacao, según el diario The Independent. Afortunadamente, las plantas genéticamente modificadas podrán sobrevivir al aumento de las temperaturas y las granjas no tendrán que ser reubicadas en mayores elevaciones.
El informe de NOAA afirma que el cambio climático no afectará a la generación actual de plantas de cacao, sino a la siguiente, lo que significa que “hay tiempo para la adaptación”. Pero el panorama aún parece terrible: NOAA advierte que actualmente el 89.5% de la tierra utilizada para cultivar cacao ya no será adecuado para 2050. Por lo que la agencia recomienda centrarse en cultivar razas específicas de semillas de cacao que sean resistentes a las sequías y apoyar más esfuerzos para cultivar semillas de cacao utilizando un método tradicional brasileño llamado cabruca – en el cual se plantan árboles adicionales en la selva para brindar sombra a los árboles de cacao, un elemento crítico que las semillas necesitan para sobrevivir.
El cambio climático claramente tendrá consecuencias de gran alcance en la forma en que la gente come y, afortunadamente, los científicos ya están descubriendo formas de adaptarse a la próxima crisis. Mientras tanto, la próxima vez que te des un bocado de chocolate, debes tomarte el tiempo para saborearlo.