Vivimos en una zozobra constante dijo Lucio Silva Díaz, porque las autoridades tanto estatales como federales, nada hacen para descubrir el paradero de mi hijo Agustín Silva Vázquez, quien desde el 21 de enero se encuentra desaparecido y en verdad sentimos que ha existido pasividad de los cuerpos policiacos y del propio ejército que se encarga de vigilar esta zona norte de Tehuantepec, que colinda con Veracruz y cercana a los Chimalapas que es una parte de selva que permite que forajidos cometan tropelías y ahí se escondan.


La molestia de todos los familiares manifestó en entrevista; es porque ya se van a cumplir tres meses de la desaparición de Agustín y es el momento en la que ninguna Fiscalía tanto federal como estatal reconoce que no han hecho nada para que aparezca mi hijo, señala entre molesto y nerviosos el padre del también periodista que hace 84 días fue secuestrado por un grupo de hombres armados según reportes iniciales.


Tenemos confianza en que nuestro familiar esté vivo y su esposa Paola como sus hijas de tres y seis años de edad, lo esperan que regresa sano y salvo, señaló el afligido padre, que como periodista que es, se preocupa de la integridad física de todos los que se dedican a esta difícil labor de informar a la sociedad y por lo mismo se es blanco de personas sin escrúpulos que buscan callar las voces que informan a la comunidad y por lo mismo se convierte en un oficio muy peligroso, pero al mismo tiempo que da muchas satisfacciones por eso lo seguimos ejerciendo, dijo Lucio Silva Díaz.



“Como miembro de la Delegación 69 de Salina Cruz, Oaxaca, del Sindicato Nacional de Redactores de Prensa (SNRP) le pido a mi secretaria general, Beatriz López Rosado y a la directiva del comité ejecutivo nacional, su participación para que como miembros de organismos internacionales como la Federación Internacional de Periodistas (FIP) que agrupa a 600 mil periodistas de todo el mundo y de la Federación de Periodistas de América Latina y el Caribe (FEPALC) que representa a 15 países del área para que intercedan ante las autoridades de nuestro país, que se muestra omisa para resolver este caso que preocupa a la comunidad periodística”, exteriorizó Silva Díaz.


Es inconcebible señaló el entrevistado que callan una voz que informa a la sociedad y nadie hace nada para restablecer esa comunicación que permite a la comunidad conocer plenamente lo que sucede a su alrededor, de esta forma las autoridades se vuelven omisas y sin ningún recato obstaculizan su capacidad “con el consabido no podemos señalar ninguna pista para evitar que se vaya afectar a la víctima o bien los malhechores puedan huir”.


En fin exigimos como ciudadanos, como organización periodística y sobre todo como familiares de Agustín Silva Vázquez, que este suceso que afecta al periodismo nacional, se esclarezca a la mayor brevedad; haciendo un llamado también a la Fiscalía Especial para la Atención de Delitos cometidos contra la Libertad de Expresión (FEADLE).


Como lo hicimos desde el primer día que sucedió este lamentable hecho, desde el Sindicato Nacional de Redactores de la Prensa (SNRP) nos unimos a las voces de diferentes organizaciones periodística y hacemos un extenso llamado a todas nuestras secciones y colegas de la prensa para difundir esta invocación que está emitiendo la familia de Agustín Silva Vázquez, quienes afirma que el viaje que realizó fue con motivo de una investigación que estaba realizando por lo que también se tienen múltiples indicios de que la desaparición podría estar ligada a su actividad periodística.


Desde el Comité Ejecutivo Nacional del SNRP. También Hacemos un llamado plural a emitir una alerta de búsqueda internacional por la cercanía de la zona selvática de la región, porque de acuerdo a comentarios allí existen lugares donde se pueden tener personas secuestradas. Además de exigir a las autoridades de los tres niveles de gobierno que cumplan con su labor de investigación porque esta desaparición de Agustín Silva Vázquez, afecta a todo el gremio periodístico a nivel nacional que espera la aparición con vida de nuestro compañero.