Las hermanas acusadas de participar en el lavado de dinero durante la administración del exgobernador de Veracruz Javier Duarte quedaron en libertad el 23 y 24 de agosto después de cumplir 1 año y diez meses en el penal de Santa Martha Acatitla.
Nadia Isabel y Elia Arzate Peralta habían sido condenadas a tres años con cuatro meses de prisión, según informó su abogado Ricardo Zinser:
Quedaron en libertad al cumplir los requisitos, como fue el pago de la multa de 48 mil 644 pesos y cumplir con la mitad de la pena; además, les impusieron restricciónes como no cambiar de residencia, no interferir con testigos que hayan declarado en su contra y acudir a firma cada ocho días al juzgado”.
La orden de libertad fue emitida por un juez federal del Centro de Justicia Penal Federal del Reclusorio Norte con base en el artículo 136 de la Ley Nacional de Ejecución de Sanciones.
De acuerdo con Mario Beteta, el abogado Ricardo Zinser detalló que sus clientas demostraron durante su reclusión el cumplimiento de sus trabajos y estudios, y a pesar de que la condena implica cubrir la reparación del daño, el juez decidió que el delito no era patrimonial sino formal, así que no hubo necesidad de reparar el daño.
Las hermanas Nadia y Elia Arzate fueron acusadas específicamente por lavar 223 millones 800 mil 963 pesos desviados durante el gobierno de Javier Duarte a través de una empresa facturera llamada Consorcio Brades.
Finalmente, las hermanas Arzate habían respondido que sí admitían la responsabilidad de operar con recursos de procedencia ilícita cuando se les detuvo en 2016 por lo que no impugnaron la resolución del juez ante el tribunal unitario.