Luego de que en el sexenio pasado la constructora ICA vivió un proceso financiero complicado debido a su elevada deuda, quiere resurgir en el gobierno de Andrés Manuel López Obrador.
La firma está interesada en participar en dos de las grandes obras: la refinería de Dos Bocas, Tabasco, y el Tren Maya.
“Vivimos una situación complicada. Nos tocó la tormenta perfecta [en 2015], pero estamos en una administración nueva y hay que ser optimistas”, dijo el presidente del Consejo de Administración de la firma, Bernardo Quintana.