El Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI) ordenó a la Procuraduría General de la República (PGR) entregar la versión pública del contrato de la compra del programa de Inteligencia Pegasus, y le recordó a la institución que las adquisiciones no se reservan.
El contrato contiene el objeto del programa Pegasus, el importe total y precio unitario, anticipo y amortización, forma y lugar de pago, vigencia, obligaciones del proveedor y del sujeto obligado.
Se concluyó que la reserva total del contrato no es procedente y que la dependencia debía elaborar una versión pública, protegiendo sólo los nombres, cargos y firmas de las personas físicas que participaron en la contratación.
De esta manera se cubre la identidad de funcionarios que en esta compra tuvieron “conocimiento privilegiado y específico sobre los procedimientos, métodos, especificaciones técnicas, tecnología y equipo utilizado para la generación de inteligencia”, resolvió el Inai con base en el planteamiento que elaboró el comisionado Óscar Guerra Ford.
La PGR contrató el software de Inteligencia al Grupo Tech Bull, filial de la firma NSO Group, que habría sido utilizado para espiar a periodistas y activistas críticos al gobierno federal.