El Presidente Andrés Manuel López Obrador confirmó esta mañana que sí fue padrino de la hija del empresario Miguel Rincón, de Biopapel y miembro de su Consejo de Asesores.

“Llevo una vida normal”, dijo esta mañana el Jefe del Ejecutivo Federal y aseguró que su asistencia al bautizo “nada tiene que ver con la cuestión pública”.

“Desde hace algún tiempo no aceptaba ser compadre, participar en ceremonias de bautismo, no asistía a este tipo de actos. Pero en este caso es algo muy especial. Conozco a Miguel, fue de los empresarios que durante la campaña expresó su apoyo a nuestro movimiento, y hay otras cosas también interesantes. Él es una persona mayor, se volvió a casar con una joven, y tuvo a esta niña preciosa; y me dio mucho gusto esto”, dijo.

“Eso no tiene nada que ver con la cuestión pública. Yo soy muy estricto, separo lo familiar, lo amistoso, con mi responsabilidad”, añadió.

El Presidente López Obrador también recalcó que él no se hará cargo de la actuación ni de sus familiares, a excepción de su hijo menor, Jesús Ernesto.

“Yo no me hago cargo si no actúan bien ni si quiera de mis familiares. Sólo me hago caso de Jesús Ernesto, porque es menor de edad, ya de mis hijos grandes, mi esposa, son responsables de sus actos”, dijo.

Y aseveró que “no por tener una relación de amistad yo voy a torcer mi camino o voy a cometer un acto de corrupción, o voy a permitir influyentismo”.

“Algunos nos gusta tener compadres, tener amigos. Soy así”, agregó.

Ayer se difundió una fotografía donde se puede ver al tabasqueño sosteniendo en brazos a una bebé, vestida con un ropón propio de los bautismos y acompañado del Cardenal Norberto Rivera Cerrera.

El evento tuvo lugar la tarde del sábado, en un rancho identificado como Los Limoneros, en Cuernavaca, propiedad de Rincón, según dio a conocer el periodista Salvador García Soto en su columna “Serpientes y Escaleras”.