Los niños del Colegio Cervantes de Torreón regresaron a clases a una semana del tiroteo en el que falleció una maestra y seis personas resultaran heridas, luego de que un niño de 11 años disparara contra ellos para después suicidarse.
Los alumnos fueron recibidos con arcos detectores de metales y revisión de mochilas a la entrada. Así fue el regreso a clases en el colegio.
En lo que respecta al uso de mochilas transparentes, se pudo apreciar que algunos alumnos -pocos- las portaban, puesto que no existe una imposición por parte de la escuela o de los mismos padres.
A la entrada del colegio llegaron padres y alumnos que hacían fila para entrar porque la revisión retrasaba el acceso.
El gobernador de Coahuila, Miguel Riquelme Solís, mencionó que en las indagatorias psicológicas del menor de 11 años que disparó en el colegio Cervantes y mató a su maestra el pasado viernes, denota una inteligencia superior a la de edad que tenía, lo que provocó que pudiera ocultar su entorno cercano.
Ayer jueves, Riquelme Solís sostuvo una reunión por casi dos horas con padres de familia del colegio Cervantes, con quienes se comprometió a conformar un grupo de psicólogos que atiendan las distintas circunstancias que de salud alrededor de la institución y su comunidad educativa.