Recientemente se viralizó en redes una triste imagen en la que se observa a una artesana purépecha cabizbaja por no poder vender sus servilletas bordadas, pese a que sólo las da a 40 pesos.
De acuerdo con el post publicado en Facebook su nombre es Adela Vidales y es originaria de la comunidad de Turícuaro.
La mujer vende sus artesanías en Michoacán, en Uruapan y San Juan Nuevo Parangaricutiro.
Doña «Adela» estaba triste porque no había vendido sus servilletas artesanales, y le dije que le iba a promover sus productos en las redes y se alegró», escribió Leo Brown.