Rafael y Arturo, dos encuestadores del Inegi, tienen la labor de realizar el Censo de Población y Vivienda 2020 en el ejido de Guajaray en el municipio de Álamos, Sonora. Debido a que en esa zona de la sierra no hay acceso en automóvil, para llegar deben transportarse en burro por dos kilómetros.
La encuestadora Inés pasó por una situación parecida, pero caminando por una hora. Para llegar a la localidad de Patosil en el municipio de Zinacantán, Chiapas, anduvo de pie por 40 minutos por terracería y 20 minutos por un sendero.
Esas son algunas de las condiciones que algunos de los 151 mil encuestadores del Inegi tienen que pasar para llegar a comunidades muy alejadas y realizar el Censo 2020, que tiene como propósito aplicar un cuestionario de 38 preguntas a alrededor de 45 millones de hogares.
Seis horas les tomó a los encuestadores en Sonora llegar al ejido Guajaray: tomaron un vehículo en Álamos para recorrer 82 kilómetros, llegaron a la comunidad de Todos los Santos y ahí tomaron un burro hacia la comunidad, donde sólo hay cinco casas.
Inés, quien habla tzotzil, fue a la localidad chiapaneca para realizar el Censo. En entrevista con Noticieros Televisa, dijo que a las personas les da más confianza hablar en su lengua.
En zonas vulnerables, el Inegi aplica un cuestionario ampliado a 103 preguntas para saber si tienen y cómo son los servicios de salud, discapacidad, educación, entre otros.