Al presentar un recurso contra la llamada «ley Bonilla», el presidente del PAN, Marko Cortés, señaló que lo sucedido el jueves en Culiacán, Sinaloa, con Ovidio, hijo de Joaquín Guzmán Loera, alias «el Chapo», «es absolutamente reprochable y tristemente marcará al gobierno de Andrés Manuel López Obrador como un gobierno cobarde».
Estamos ante un #EstadoFallido, por ello en el #PAN hacemos nuestro más enérgico reclamo por el sometimiento del @GobiernoMX a la delincuencia organizada: @MarkoCortes pic.twitter.com/YCXQojCBLr
— Acción Nacional (@AccionNacional) October 18, 2019
El dirigente del PAN indicó que la detección y posterior liberación de Ovidio Guzmán por parte de autoridades mexicanas «es inaceptable”, porque condena la vida de personas en todo México.
Según él, la delincuencia organizada “ya le tomó la medida al gobierno, ya quedó claro que aquí quien manda es la delincuencia y no es el gobierno, y eso es un Estado fallido”.
Ante ello, subrayó que AMLO debe comenzar a gobernar y no a seguir informando en sus mañaneras todos los días, “sino a gobernar, a darnos resultados».
Marko Cortés señaló que ante este hecho lo mínimo que debe ocurrir es la renuncia de todos los funcionarios que participaron en el operativo. «Si no renuncian todos los responsables de lo ocurrido, entendemos entonces que el Presidente de la República pactó con la delincuencia», opinó.
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