La economía mexicana perdió más de medio millón de empleos formales en abril en medio de la crisis del COVID-19, la mayor caída desde que hay registro, informó este martes el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).

“Como consecuencia de los efectos derivados de la emergencia sanitaria, en abril se registra una disminución mensual de 555.247 puestos, equivalente a una tasa mensual de -2,7 %”, detalló un comunicado del IMSS, que presenta uno de los principales indicadores para medir el trabajo formal.

Esta caída se sumaría a las 198.033 plazas perdidas entre el 13 y el 31 de marzo, como anunció el IMSS el 8 de abril, lo que daría un total de 753.280 trabajos perdidos por la pandemia del coronavirus SARS-CoV-2.

También se añade a una pérdida en abril de 6.689 patrones, como se llama a los empleadores que registran a trabajadores ante el IMSS.

Sin embargo, al considerar los empleos creados en los primeros meses del año, el IMSS precisó que la reducción en el primer cuatrimestre de 2020 es de 493.746 puestos, de los que el 67,2 % corresponde a empleos permanentes.

“En los últimos doce meses se registró una disminución de 451.231 puestos, equivalente a una tasa anual del -2,2 %”, ahondó el instituto.

Las cifras de abril reflejan el primer mes de la emergencia sanitaria que decretó el Gobierno mexicano el 30 de marzo, cuando suspendió actividades no esenciales para combatir el COVID-19, que acumula 36.327 contagios y 3.573 muertes en el país.

Los datos se alinean con las proyecciones de la junta del Banco de México y de organismo empresariales como la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin), que estima que el país pierde 20.000 empleos diarios con la contingencia.

El aumento del desempleo muestra los “efectos negativos de la recesión económica y en particular del retroceso del sector industrial mexicano”, argumentó el Instituto para el Desarrollo Industrial y el Crecimiento Económico (IDIC).

En marzo, la actividad industrial retrocedió 4,9 % a tasa anual, en cifras desestacionalizadas, con lo que se acumulan 18 tasas negativas consecutivas, una cifra superior a la de la crisis de 1995 y que igualó lo ocurrido en 2009, alertó el IDIC, que estima una pérdida de 960.000 empleos formales en 2020.

Otros especialistas han advertido que las cifras del IMSS ofrecen un retrato parcial de la crisis en un país con 31,3 millones de personas en la informalidad, un 56,2 % del total de 55,6 millones de trabajadores, según el Instituto Nacional de Geografía y Estadística (Inegi).

El Instituto de Investigaciones para el Desarrollo con Equidad (Equide) de la Universidad Iberoamericana calculó la semana pasada que entre 5,2 y 8,1 millones de mexicanos perdieron su empleo, no pudieron salir por ingresos o “fueron descansados” por sus empresas ante la pandemia.

El IMSS registra 19,9 millones de puestos de trabajo, de los que el 86,4 % son permanentes y el 13,6 % son eventuales, porcentajes que “se han mantenido relativamente constantes” en los últimos años, informó el comunicado.

Por otro lado, reportó un salario promedio mensual de 403,6 pesos diarios (16,69 dólares), lo que equivale a una tasa de crecimiento anual de 1,5 %.