Con el grito: “¡queremos vivir!, ¡queremos vivir! , un grupo de al menos 100 mujeres protestan este viernes frente a Palacio Nacional y ante las oficinas del Gobierno de la Ciudad de México para exigir a la Secretaría de Salud que elInstituto de Salud para el Bienestar (Insabi) mantenga el subsidio que el Seguro Popular daba a la Fundación de Cáncer de Mama (Fucam).
En las cartulinas de mujeres de la tercera edad y otras más jóvenes se leen exigencias como “un Gobierno democrático no mata a los enfermos de cáncer”. Las mujeres esperan a que inicie la reunión que cinco de sus representantes tendrán con funcionarios de la Secretaría de Salud y que acordaron ayer luego de que protestarán y cerrarán por una hora el tramo de Calzada de Tlalpan cercano a la Fucam. Las manifestantes juntarán firmas para entregarlas en la reunión.
“La fundación atiende a cerca de 8 mil 300 pacientes y cada año recibe mil 500 casos nuevos de cáncer de mama, esa es la población que se vería afectada”, dijo Alberto Tenorio, director del Área Investigación y Enseñanza y parte de la directiva médica de la Fucam, en entrevista con SinEmbargo.
Desde 2005, la fundación atendía de forma gratuita a beneficiarias del Seguro Popular por una alianza que tenía con el Gobierno federal, misma que terminó cuando el Seguro Popular fue reemplazado por el Insabi, el 1 de enero de este año.
Ayer, la Fucam explicó en un comunicado que desde esa fecha financiaron los tratamientos de pacientes con la esperanza de concretar un convenio que no se alcanzó, por lo que agotó todos sus recursos y anunció que “se ve obligada a frenar la gratuidad (en el servicio), ya que se carecen de insumos y medicamentos para este tipo de atención”.
Araceli tiene cáncer de mama de etapa tres –una de las más avanzadas–, doctores detectaron la enfermedad en junio de 2019. Para septiembre seguía sin recibir su primera quimioterapia en el Centro Estatal de Cancerología (CECAN) de Xalapa, Veracruz, por lo que decidió viajar a la Ciudad de México para atenderse en la Fucam. Ahí inició su tratamiento en menos de 20 días y de forma gratuita por tener Seguro Popular. Después de que la Fucam anunció que cobrará todos sus servicios porque no logró un acuerdo con el recién creado Instituto de Salud para el Bienestar, Araceli teme que su padecimiento y el de las mujeres atendidas en la organización se agravará, pues serán remitidas a hospitales públicos saturados. La directiva de Fucam confirmó que serán miles las personas afectadas.
La noticia generó protestas de mujeres en redes sociales y afuera de Fucam, por lo que la Secretaría de Salud (SS) justificó la decisión con su interés por “garantizar la atención sin intermediarios”. Dijo que de 2017 a 2019 el Gobierno pagó a Fucam más de 776 millones de pesos para atender el cáncer de mama y aseguró que la fundación se comprometió con el Insabi a seguir atendiendo a quienes recibían tratamientos, pues estos “ya están cubiertos por el Gobierno Federal”.
Pero pacientes como Araceli aún están en la incertidumbre. La mujer de 45 años de edad acudió ayer a la Fucam a recibir la novena de las 15 radioterapias que tiene programadas luego de que más de seis quimioterapias no lograron reducir el tumor que tiene en su mama derecha. Al llegar le dijeron que una vez terminadas las radioterapias tendrá que financiar las siguientes etapas del tratamiento, pero ella ni su familia tienen la solvencia económica para hacerlo.