Irma Lilia Garzón Bernal dijo que lo hacía para “cerrarle el paso a Morena”
La candidata del PAN a la gubernatura de Guerrero, Irma Lilia Garzón Bernal, declinó por el abanderado de la alianza PRI-PRD, Mario Moreno Arcos, para cerrarle “el paso a Morena” y para que no haya un “gobierno de total desmadre”.
Este sábado, en un mitin en Ometepec, en la Costa Chica de Guerrero, en el cierre regional de Moreno Arcos, Garzón Bernal declinó.
El operador de esta declinación fue el exgobernador Ángel Aguirre Rivero, quien desde un día antes difundió en sus redes sociales una fotografía junto con Garzón Bernal en la que, dijo, hablaron del voto útil.
Como pasa en la candidata de Morena, Evelyn Salgado Pineda, donde se le cuestiona el protagonismo de su padre, Félix Salgado Macedonio, en la de Moreno Arcos pasa lo mismo, pues es Aguirre Rivero quien ha tomado un papel principal.
El exgobernador anunció esta declinación y no el equipo de Moreno Arcos, además Aguirre Rivero ha sido el que le responde a Salgado Macedonio o el que critica a Salgado Pineda.
Asimismo, destaca que la declinación de la panista fue en Ometepec, pues éste es pueblo natal de Aguirre Rivero y su bastión político.
En su anuncio, Garzón Bernal dijo que lo hacía para “cerrarle el paso a Morena”.
“Yo no quiero una pachanga sexenal, de canto callejero, un gobierno de ocurrencias irresponsables, de desmadre total”, manifestó sin referirse a la posibilidad de que gane la elección Evelyn Salgado.
Desde el inicio de la campaña una de las versiones que corrieron es que en cualquier momento la candidata del PAN declinaría por Moreno Arcos.
Sin embargo, para descartar esa versión, la candidata convocó a una conferencia de prensa para afirmar que no lo haría y se comprometió a terminar su campaña.
“Que se escuche bien y fuerte: me adhiero a Mario Moreno. Le apuesto a una alianza estratégica, le apuesto a una alianza útil, porque estoy segura que ganaremos este 6 de julio”, dijo durante el mitin en Ometepec.
En esta campaña, la candidata del PAN no tenía ninguna posibilidad de ganar, según distintas mediciones, pues apenas alcanza tres puntos de preferencias, muy lejos del primer lugar.