Si bien con el nuevo contrato que el gobierno de Andrés Manuel López Obrador negoció con el Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM) redujo de manera fuerte las prestaciones que se les daba a los representantes sindicales, éstos aún siguen reciben recursos por hasta 60 millones de pesos, pero por un aumento en las cuotas que pagan los trabajadores.
Fuentes cercanas a Petróleos Mexicanos confirmaron que la estrategia de los líderes sindicales, encabezados por Carlos Romero Deschamps transfirieron esa obligación de pago a los trabajadores sindicalizados.
«Ahora se elevaron las cuotas sindicales entre los trabajadores. Desde entonces, los líderes sindicales llegan a percibir al mes entre 40 y 60 millones de pesos», reveló a LPO una fuente que prefirió resguardar su identidad.
Si bien con el nuevo contrato que el gobierno de Andrés Manuel López Obrador negoció con el Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM) redujo de manera fuerte las prestaciones que se les daba a los representantes sindicales, éstos aún siguen reciben recursos por hasta 60 millones de pesos, pero por un aumento en las cuotas que pagan los trabajadores.
Fuentes cercanas a Petróleos Mexicanos confirmaron que la estrategia de los líderes sindicales, encabezados por Carlos Romero Deschamps transfirieron esa obligación de pago a los trabajadores sindicalizados.
«Ahora se elevaron las cuotas sindicales entre los trabajadores. Desde entonces, los líderes sindicales llegan a percibir al mes entre 40 y 60 millones de pesos», reveló a LPO una fuente que prefirió resguardar su identidad.
Las fuentes coinciden en que esta imposición no ha encontrado oposición derivado al temor que existe ante los trabajadores que pertenecen al sindicato y a las represalias que puedan tomar, a pesar de que de su salario se esté descontando alrededor del 10%.
A inicios de agosto de este año Andrés Manuel López Obrador dio a conocer el nuevo contrato con Romero Deschamps. Presumió que significaría ahorros para las finanzas públicas por hasta 1,600 millones de pesos, principalmente porque uno de los acuerdos fue que los líderes aceptaron reducir sus privilegios hasta en 80%.
«Contrario a lo que dice el Reforma obtuvimos un ahorro en prestaciones que se otorgaban a dirigentes de 1,600 millones de pesos. Celebro que se haya firmado este acuerdo», aseguró el mandatario federal. Explicó que con este acuerdo se mantuvieron las prestaciones a los trabajadores y el ajuste se hizo «arriba».
