El integrante de la Comisión de Puntos Constitucionales, diputado Virgilio Caballero Pedraza (Morena), aseguró que el Mando Policial Mixto no tendrá los efectos esperados si mantiene un enfoque de control sobre las corporaciones municipales, antes que propiciar que ejerzan su labor en condiciones dignas y formando vínculos con la población.
Al inaugurar el foro “Seguridad Pública y Mando Policial Mixto”, en San Lázaro, indicó que aunque a primera vista eliminar las corporaciones locales parece una medida positiva, otorgar mayores poderes a las agrupaciones estatales y federales sin establecer cercanía con la ciudadanía y sus necesidades del día a día, entraña más problemas de los que pretende solucionar.
Se deben tomar en cuenta las diferencias específicas de cada entidad, incluyendo aquellas que se rigen por usos y costumbres, porque si bien, una función del Estado es proveer de seguridad a los ciudadanos, no se puede establecer a cualquier costo, afirmó.
Por ejemplo, continuó, la presencia del Ejército en tareas de seguridad pública viola la Constitución; sin embargo “ahí está desde hace más de 10 años”, y los municipios son los más débiles en el combate a la delincuencia organizada, por lo que “a veces llegan a formar parte de ella”.
“De ahí que el Senado de la República modificara la propuesta del Ejecutivo para mantener a las policías municipales; se dio paso al Mando Mixto, un sistema de coordinación entre Federación, entidades y municipios para ejercer las funciones de seguridad”, explicó.
Caballero Pedraza señaló que la confianza de la población en las instituciones de seguridad se ha deteriorado, el país está ocupado por la delincuencia, los índices de inseguridad aumentan y existen más denuncias de violaciones a derechos por parte de autoridades.
“Cada año hay 22.8 millones de víctimas de delito, pero las acusaciones son escasas; el 93 por ciento de los afectados no denuncia por desconfianza o miedo en las autoridades. La confianza está fracturada por casos como Ayotzinapa, Tanhuato o Nochixtlán, donde las corporaciones de distintos niveles de policías se han visto involucradas”, apuntó.
La diputada Delfina Gómez Álvarez (Morena) subrayó que la alarmante situación de desigualdad y violencia en el país, atenta sistemáticamente contra los derechos humanos y la calidad de vida de los ciudadanos, además, de que sitúan a México como el tercer país más violento del continente americano.
De ahí, la importancia de los mandos policiacos. “El Mando Mixto busca que los municipios tengan una policía de proximidad y de tránsito, y mantener la autonomía y soberanía de los estados, pero que también aduce y violenta el artículo 125 de la Constitución”.
Acabar con la violencia, que costó 236 mil millones de pesos en 2015, más del 1 por ciento del Producto Interno Bruto, deber ser una prioridad de todos los gobiernos; es obligación de todos los estados garantizar las condiciones óptimas para el desarrollo social.
“Hoy México es un país de barbarie, represión, asesinatos, narcotraficantes y gobernantes corruptos. Durante la actual administración han ultimado, por ejemplo, a 43 alcaldes, es decir, no son hechos aislados, sino una emergencia de seguridad”, comentó.
El diputado Rodrigo Abdala Dartigues (Morena), consideró que el Mando Único es una medida que arrebata facultades al municipio y concentra el poder de la policía. “La propuesta del Ejecutivo coloca al ayuntamiento en el eslabón más débil dentro de la cadena”.
“Crea una figura llamada Secretario Ejecutivo del Consejo de Seguridad Pública, en quien se deposita una gran cantidad de facultades, si no es que todas respecto a la policía”, explicó.
El integrante de la Comisión de Puntos Constitucionales del Senado de la República, Manuel Bartlett Díaz (PT), subrayó que los municipios son la célula básica de la sociedad y si no hay apoyo ni capacitación a los policías locales es porque no se les ha dado recursos, ya que estos se han concentrado en la Policía Federal, el Ejército y la Marina.
Consideró que el objetivo del Mando Mixto es quitar a los municipios su responsabilidad sobre la seguridad pública de sus entornos. “Se dice que sus policías están corrompidos, que son muy débiles y que hay que sustituirlas, pero es una fachada”.
El ex General Brigadier del Ejército Mexicano, José Francisco Gallardo Rodríguez, aseguró que el Ejército reclama una modernización. “Debe regresar a sus cuarteles y encargarse de su función específica de defensa nacional, como lo marca la Constitución. Por su parte, el Congreso debe crear una policía civil respetuosa de los derechos humanos y con funciones repartidas entre la Federación, entidades, municipios y comunidades indígenas”.
Indicó que “el sistema de seguridad del país está desarticulado y los criterios de policía única se imponen. La Carta Magna, en su artículo 129, previene específicamente que las Fuerzas Armadas, en tiempo de paz, no pueden realizar funciones que no sean las de disciplina militar”.
El rector de la Universidad de las Américas, Alejandro Gertz Manero, expresó que el Mando Mixto “tiene como objetivo controlar a la población y sujetarla a una decisión de poder que dice cuando tienen justicia y cuando no”.
Agregó que el sistema actual tiene como función fundamental dar seguridad y justicia personal y patrimonial a los mexicanos; sin embargo, su nivel de eficiencia es de 2 por ciento, y el 99 por ciento de los delitos queda impune.
Durante su presentación, Pavel Díaz Román, especialista de El Colegio de México, afirmó que la población no teme al crimen organizado, sino al común; además, por la poca confianza hacia las autoridades no de denuncian el 93.7 por ciento de los delitos. “En donde menos se denuncia es el Estado de México, Veracruz y la Ciudad de México”.
Alertó que Guerrero es la entidad con más homicidios, 67 por cada cien mil habitantes, seguido por Chihuahua, Colima y Sinaloa. Acusó que el Mando Mixto afrenta al municipio libre, por lo que no se debe centralizar el poder, sino dotar de recursos y fortalecer a las policías municipales.
Alberto Erubiel Tirado, coordinador académico del Programa de Seguridad Nacional y Democracia en México, de la Universidad Iberoamericana, consideró que la iniciativa de Mando Mixto “nos deja en la lona”, porque se legitima la violación a priori, además de que continúa un patrón que ha ido cambiado, que es el de mayor influencia castrense en la vida del país, empezando por la seguridad pública.
“El escenario que tenemos es de mayor riesgo. Sí hay un desgaste, pero no sólo de las Fuerzas Armadas en términos operacionales, sino en la deslegitimación de su operación, lo que es más grave”, señaló.
El alcalde de Tochtepec, Puebla, Marcos Pérez Calderón, presidente de la Asociación de Autoridades Locales de México. A.C. (AALMAC), pidió que en lugar de buscar instaurar un Mando Único, deben coadyuvar los tres órdenes de gobierno para hacer frente al crimen. “Debemos dejar atrás problemas de diferencias políticas, porque eso retrasa o limita los recursos para policías municipales”.
Subrayó que los grupos criminales cuentan con mejores armas, vehículos y chalecos antibalas que las policías municipales, debido a que no existen recursos para equiparlos, ni tampoco para aumentar los sueldos a los elementos, quienes ante el miedo y bajos ingresos prefieren renunciar. El alcalde, manifestó que si en febrero del siguiente año no cuenta con las garantías y recursos en materia de seguridad pública, renunciará a su cargo, a fin salvaguardar el bienestar de su familia.