Luego de que Rosa Margarita Ortiz Macías, esposa del ex diputado priísta Adolfo Micalco Méndez, denunció que fue víctima de asalto y violación a bordo de un autobús de pasajeros de la línea ETN, esto con la complicidad del chofer; el director general de dicha línea, Francisco Javier López Barrón sostuvo que en caso de que la línea o los conductores hayan tenido algún tipo de responsabilidad, que se aplique la ley.
En conferencia de prensa para ofrecer su versión respecto a los hechos registrados el pasado martes 7 de junio a bordo del autobús que partió de la Ciudad de México con destino a San Luis Potosí; López Barrón pidió acelerar las indagatorias para poder deslindar responsabilidades.
“Si nosotros somos responsables y aquí los señores conductores tienen alguna responsabilidad y están involucrados, nosotros mismos estaremos llevando más acciones para que asuman su responsabilidad y se les aplique la ley”, afirmó el director de ETN.
Acompañado por los dos conductores del autobús que presenciaron los hechos, López Barrón, afirmó que no se trata de desvirtuar la versión de la denunciante, sino coadyuvar con las autoridades para el esclarecimiento del caso.
En su momento, Rito Cruz López, conductor de la unidad, narró cómo fue amenazado por los dos asaltantes quienes lo abordaron pasando la zona de Coyotepec sobre la carretera México-Querétaro.
Dijo que en todo momento fue encañonado por los sujetos por lo que no tuvo oportunidad de reaccionar de forma inmediata, al verse amenazado, abrió la puerta del autobús para que ingresaran los delincuentes quienes despojaron de sus pertenencias a los pasajeros, entre estos, la señora Rosa Ortiz.
“Yo no soy ningún delincuente, yo trabajo para mí empresa honestamente, yo soy víctima también de lo que está pasando“, afirmó Cruz López.
A pesar de que la afectada acusó que el chofer estuvo involuctado en los hechos, Cruz López aseguró que ni siquiera se percató de la supuesta agresión sexual.
No obstante, se dijo dispuesto a enfrentarse a la prueba del polígrafo para comprobar su inocencia.
A su vez, José Guadalupe Montaño, el segundo chofer que venía a bordo del autobús, aseguró que tampoco se dio cuenta de los hechos toda vez que se encontraba descansando en el camarote hasta que su compañero fue a advertirle de lo ocurrido ya cuando se habían bajado los agresores.
Luego del asalto, que dicen, tuvo una duración de 20 minutos aproximadamente, el conductor manifestó que dieron aviso a una patrulla de la Policía Federal que se encontraba en la zona para solicitar una ambulancia y atender a los lesionados, ademas, que establecieron comunicación con la empresa.
Ahí, invitaron a los pasajeros presentar la denuncia correspondiente, pero aseguran que éstos se negaron y prefierieron continuar con el viaje hasta su destino final.
En el caso de Rosa Ortiz, señalan que ésta venía acompañada por una familiar quien alcanzó a pedir ayuda a sus familiares durante el asalto, por lo que a la altura de la caseta de Palmillas ya las estaban esperando sus familiares y descendieron del vehículo.
De acuerdo al representante de la línea de autobuses, ya han establecido comunicación tanto con algunos pasajeros como con familiares de las víctimas para ofrecer su apoyo, incluso están dispuestos a dar algún tipo de indemnización a los afectados en caso de ser necesario.
Durante la rueda de prensa, fueron cuestionados sobre los sistemas de seguridad con los que cuenta la línea, y admitieron que los botones de pánico se encuentran inoperantes al igual que las cámaras de seguridad.