El 23 de febrero de este año, la Alcaldía anuncio el programa que consistía en colocar los fotoinfractores en vialidades principales; cuatro serían fijos y cuatro se instalarían en puntos itinerantes.
Con los dispositivos, se detectaría a vehículos que excedieran los límites de velocidad y se les enviaría una multa a su domicilio.
A través de mantas, carteles en Palacio Municipal y la página de internet, el Ayuntamiento difundió que las sanciones arrancarían este mes.
REFORMA recorrió vialidades como la Avenida Lago de Guadalupe, la Avenida Jorge Jiménez Cantú, el Bulevar Ignacio López Mateos y Bulevar Ignacio Zaragoza, pero sólo encontró dos cámaras con mantas alusivas al programa.
Ambas se ubican en la Avenida Jorge Jiménez Cantú, la primera en el camellón central, frente a Bosque Esmeralda, y la segunda en las inmediaciones de la Presa Madín.