Argentina, Australia, Canadá, Chile, Estados Unidos y México acordaron hoy una declaración para “desconocer” la victoria del presidente Nicolás Maduro en Venezuela ante la “falta de legitimidad” de las elecciones del domingo y amenazaron con aplicar al país sanciones económicas y financieras.
En el marco del encuentro de ministros de Exteriores del G20 realizado en Buenos Aires, el canciller argentino, Jorge Faurie, leyó el texto en el que los firmantes aseveraron que los comicios de este domingo son “una clara reafirmación de la ruptura de la legitimidad democrática en Venezuela”.
Según el Consejo Nacional Electoral (CNE) de Venezuela, Maduro resultó reelegido al obtener 6,1 millones de votos en los comicios del domingo, de los 20,5 millones de venezolanos que estaban llamados a las urnas.
El índice de abstención en las elecciones quedó en 53,98 %, lo que significa una de las participaciones más bajas de la historia venezolana.
“Ante este resultado”, prosigue el texto, los Gobiernos participantes “consideran posibles medidas económico-financieras sancionatorias del régimen autoritario de Maduro, procurando en ello no afectar al pueblo venezolano”.
Los países del acuerdo subrayaron asimismo que “desconocen” los resultados de los comicios ante “la falta de legitimidad del proceso”, al haber sido convocados por “la ilegítima Asamblea Nacional Constituyente, excluyendo la participación de actores políticos” y no haber contado con “observación internacional independiente”.
Estas naciones apuntaron a que la solución de la crisis “debe ser alcanzada de forma pacífica y con el protagonismo de los propios venezolanos”, por lo que impulsarán a ese fin “acciones y medidas que permitan restaurar la democracia y el respeto a los derechos humanos”.
Faurie también se refirió a la “crisis humanitaria” que vive el país caribeño, que “se ha agravado de manera alarmante” y está siendo “ratificada por el creciente éxodo de venezolanos”, una corriente migratoria que supone una “amenaza para la seguridad y la estabilidad regional”.
Además, los firmantes de la declaración instaron al “régimen autoritario de Maduro” a “abandonar la indiferencia ante el sufrimiento de su pueblo” y permitir establecer “un canal humanitario sin demoras” para el suministro de alimentos y medicinas por parte de la comunidad internacional.