La nueva administración federal que encabece Andrés Manuel López Obrador, virtual ganador de las elecciones, recibirá de la actual, una herencia que representará una carga para las finanzas públicas.
Cifras de Hacienda al cierre de mayo refieren que los Saldos de la Deuda del Sector Público Federal, la medida más amplia de la deuda, llegaron a los 10.8 billones de pesos, el monto más alto del que se tenga registro.
Al cierre de 2017, esta deuda pública representó 47.2% del PIB, y aunque este último índice fue menor al cierre de 2016; 49.4% del PIB, es el más alto que deja una administración a menos de un año de su salida.
Tan solo los primeros cinco meses del año el saldo aumentó 496,914 millones de pesos (mdp).
“Las finanzas públicas que recibirá el nuevo gobierno están mucho más apretadas que las que recibió la administración actual hace seis años, que recibió una deuda de 36 puntos del PIB, y un costo financiero que es 90% más pequeño al que tenemos ahora”, dijo Mariana Campos, coordinadora del programa de Gasto Público en México Evalúa.
Tomando en cuenta los primeros cinco años de anteriores administraciones, en 1993, con Carlos Salinas de Gortari, la deuda representó el 26.5% del PIB, con Ernesto Zedillo, en 1999, 24.8%; en 2005 con Vicente Fox, 22.1% del PIB y con Felipe Calderón en 2011, un año antes de heredar el poder a Enrique Peña Nieto, el 34.8%, según datos de Hacienda.
Lamentablemente no existe un rastreo puntual del dinero obtenido por financiamiento durante la actual administración, pero considerando que el gasto de inversión cayó a niveles históricos durante la actual administración, todo indica que se fue a gasto corriente, comentó Héctor Villarreal, director del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP).
El monto de la deuda pública representará uno de los mayores retos para el diseño del presupuesto de la administración entrante, sobre todo porque cada año se deben pagar los intereses que ésta genera (costo financiero de la deuda), agregó el experto.
De enero a mayo de este año el sector público ha pagado 181,724 millones de pesos (mdp) por el costo financiero de la deuda, 21% más que el mismo periodo de 2017.
Mariana Campos explicó que el incremento en el costo de la deuda se ha dado por el aumento de la tasa de interés de referencia en México y por el incremento en el tipo de cambio, pues cuando es más alto, el servicio de la deuda que se tiene en dólares se incrementa en términos de pesos.