El Agente del Ministerio Público de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM) acreditó la probable participación de dos sujetos en el delito de secuestro, ilícito por el que un Juez del Distrito Judicial de Jilotepec determinó vincularlos a proceso.

Se trata de Noé “N”, de 32 años de edad, originario del estado de Jalisco, y Vladimir “N”, de 42 años, oriundo del estado de Michoacán, quienes enfrentan cargos por estos hechos.

Ambos sujetos son investigados por el secuestro de un hombre, quien habría sido privado de la libertad en la ciudad de Altamira, en el estado de Tamaulipas, el pasado 22 de marzo, y luego trasladado a un inmueble del municipio mexiquense de Jilotepec.

La liberación de la víctima, así como la detención de estos individuos fue realizada el pasado viernes 23 de marzo, cuando elementos de la Base de Operaciones Mixtas (BOM), de la Secretaria de Seguridad del Estado de México (SSEM), Policía Municipal de Jilotepec, y Agentes de la Fiscalía estatal, se encontraban realizando un operativo en la localidad conocida como Comunidad, y se percataron que de un inmueble salían los ahora detenidos, mismos que tenían sometida a una persona y con la cabeza cubierta.

Los probables secuestradores al percatarse de la presencia policiaca intentaron darse a la fuga, sin embargo fueron alcanzados y detenidos, además fue liberado un joven de 22 años de edad.

A estos sujetos les fue asegurada una bolsa al parecer con droga y un arma de fuego calibre 9 mm, con cargador abastecido con 14 cartuchos útiles.

Cabe mencionar que dentro del inmueble donde la víctima se encontraba privada de la libertad, fueron asegurados diversos contenedores con substancias, líquidos y recipientes al parecer utilizados para elaborar drogas sintéticas. Por ello el inmueble, que aparentemente es un narcolaboratorio, también fue asegurado.

En tanto que los dos detenidos fueron presentados ante el Agente del Ministerio Público, autoridad que inició la carpeta de investigación correspondiente por el delito de secuestro, y luego los remitió ante un Juez en el Centro Penitenciario y de Reinserción Social de Jilotepec, autoridad que los vinculó a proceso, con un plazo de cuatro meses para el cierre de investigación, sin embargo se les presume inocentes hasta que sea dictada una sentencia condenatoria en su contra.