Fue deportado de España y Egipto, encerrado en un centro psiquiátrico en Rusia, detenido en ese país y aun así, Aleksei M. entró a México y consiguió la residencia permanente; sin contar con cuatro años de residencia en Cancún.

Con ello, queda en evidencia la corrupción y la indiferencia al interior del Instituto Nacional de Migración (INM), en donde se le otorgó la estancia legal y permanente en nuestro país.

Incluso, el INM recibió reportes sobre el comportamiento agresivo y violento del ruso en Cancún, y no hicieron nada para investigar el caso, esperando a que cometiera algún delito para intervenir.

En noviembre del 2016, el ruso fue detenido por policías federales y se le dio parte al INM, sin que de nueva cuenta se hiciera nada para analizar su permanencia en el país.

El nombre de Aleksei M. ha dado la vuelta al mundo, después de que sufriera intento de linchamiento por una turba enardecida en Cancún, la noche del pasado viernes en la Supermanzana 70.

Antes era conocido por sus transmisiones en vivo a través de su canal de You Tube, en donde mostraba sus recorridos por la ciudad y las agresiones que cometía en contra de ciudadanos en su mayoría mujeres y niños.

Estas actitudes del ruso no eran nuevas, pues desde hace varios años ya era conocido en otros países por su agresividad.

En el 2003, Aleksei M. fue internado en un hospital psiquiátrico en Rusia donde sólo estuvo un mes, después de haber sido arrestado dos veces por conducta desequilibrada.

En abril del 2013, fue arrestado por la policía rusa después de atacar a transeúntes, y dichos ataques los transmitía en vivo en su canal de You Tube.

Trabajó como instructor de buceo en Egipto y España, países de los que fue deportado por conductas agresivas, pues siempre llevaba un cuchillo aterrorizando a la ciudadanía.

Y con todo este historial delictivo y agresivo, Aleksei M. llegó a Cancún, en donde el Instituto Nacional de Migración (INM) no se tomó la molestia de investigar sus antecedentes.

Peor aun, le fue concedida la residencia permanente en nuestro país, la cual él mismo presumía en su canal de Internet.

De acuerdo con gestores de trámites migratorios, para que un extranjero pueda obtener la residencia permanente, sólo se otorga después de cuatro años de residencia o tener un hijo nacido en México.

Sin embargo, la corrupción que impera en el INM, ha permitido que una gran cantidad de extranjeros que incluso cuentan con antecedentes penales en otros países, logran obtener la residencia permanente a cambio de cuatro mil dólares.

Incluso, en febrero de este año un ex funcionario de migración fue detenido en posesión de alrededor de 100 actas de nacimiento falsificadas, las cuales son usadas para otorgar la residencia permanente a extranjeros, al presentar las actas de supuestos hijos nacidos en nuestro país.

En el caso del ruso, los funcionarios del INM tenían conocimiento de sus acciones violentas y aun así, no hicieron nada al respecto, hasta que cometiera un delito y una autoridad lo turnará a migración.